No los había más fuertes en el bombo. Real Madrid y Barcelona tendrán que lidiar con los peores rivales posible: Juventus y Chelsea, líderes incuestionables en sus respectivas ligas. Emparejamientos explosivos, desde luego, pero no menos que otros que deparó el sorteo, como un Manchester United-Milán o un Bayern Múnich-Arsenal. Incluso tiene su miga el duelo entre el vigente campeón, Oporto, y el siempre imprevisible Inter. Al lado de estas cinco eliminatorias, las otras tres (Liverpool-Bayer Leverkusen, PSV Einhoven-Mónaco y Olympique Lyonnais-Werder Bremen) parecen una broma de mal gusto. O por lo menos, otra cosa muy distinta a esta Champions, que ya pasa por ser la más competida de la historia.
Las elevadas probabilidades matemáticas que había de que los dos representantes españoles quedarán emparejados con rivales ingleses se esfumaron como por arte de magia debido a lo madrugadoras que fueron las bolas que contenían los nombres de Real Madrid y Barcelona. La del equipo blanco salió en primer lugar y la del azulgrana, en tercero.
Emilio Butragueño, representante madridista en el acto, se había situado en la fila posterior a la que ocupaban los representantes de la Juventus, con Roberto Bettega a la cabeza. Cuando quedó consumado el emparejamiento, no pudieron evitar cruzarse unas forzadas sonrisas que tenían más de preocupación que de otra cosa.
Claro, que para murmullos gordos los que trajo consigo el duelo entre el Barcelona y el Chelsea. A su manera, bien distinta, son los equipos que están realizando el fútbol más convincente en todo el continente. Será un duelo espectacular, sin duda, que dejará fuera de la Champions League a uno de los grandes favoritos al título. Es lo que van a tener estos octavos de final: cinco aspirantes a ganar el título ni siquiera llegarán en esta ocasión a los cuartos.
Bettega pide la doble liguilla
Roberto Bettega, presidente del G-14, se lamentó por el hecho de que el sorteo de ayer deparara cinco eliminatorias fortísimas y tres que interesan bien poco: "La UEFA podrá comprobar la gran ocasión que ha perdido de que hubiera cuatro liguillas grandiosas en esta Champions. Está claro que era mucho más interesante el viejo formato de la competición, con dos liguillas. De esta manera, cinco equipos que aspiran a ganar el título van a quedar eliminados demasiado pronto".
