Mariano García Remón, entrenador del Real Madrid, aseguró que aunque ha pasado "quince días difíciles", tenía "fuerzas para sacar el equipo adelante" y que "con un mes de competición no se podía augurar una mala temporada".

"Nunca he pensado en tirar la toalla. Ser entrenador del Real Madrid es bonito, pero de puertas adentro es muy difícil y comporta una gran presión. He pasado quince días difíciles y hay que saberlo llevar", dijo.

"No voy a decir que me voy, porque me siento con fuerzas para sacar del equipo el máximo rendimiento. No obstante, mi cargo siempre va a estar a disposición del presidente", añadió García Remón a Telemadrid dentro de su programa "El Círculo a primera hora".

El técnico reconoció que no era fácil motivar a una plantilla como ésta, pero que "la actitud del equipo ha cambiado en estos últimos quince días".

"Los jugadores donde tienen que sentirse cómodos es en el campo de juego. Eso ya lo hemos conseguido y ahora tenemos que conseguir que se refleje en el juego que hacemos. Se decía que eran unos pasotas, que no se implicaban y han demostrado todo lo contrario", observó el entrenador.

No para de pedir a los jugadores

El técnico también dijo que no había parado de pedirles cosas a los futbolistas, "sacrificio, trabajo, organización, que estén media hora antes de los entrenamientos en el vestuario, entrenar los días de partido. Y ellos no me han pedido nada a cambio".

García Remón volvió a ratificar que la decisión de suprimir las concentraciones era idea suya y también habló del fichaje de Michael Owen.

"El exceso de buenos jugadores no hace mala una plantilla, no la desequilibra, sino que la mejora. Lo que tenemos que hacer es trabajar con la plantilla que tenemos. De hecho, el equipo ya está jugando mejor. Owen es un delantero más y unos partidos estará en el banquillo y otros jugará. Nuestro principal problema es que sólo llevamos cuatro goles en Liga", indicó. La mala racha de resultados del equipo también mereció su comentario.

"Cuando van mal las cosas es cuando se ve la categoría de un club. Con un mes de competición no podemos pensar que la temporada va a ser mala", subrayó.

Respecto al tipo de vida de los futbolistas, el entrenador fue tajante. "En mi época firmábamos que no podíamos estar por ahí hasta más tarde de las doce de la noche. Ahora, parece que no es legal firmar algo así, pero hay que recomendarles que su vida deportiva debe responder a las exigencias de este gran club, y si no lo hacen hay que castigarlos. El club debe ser inflexible en este aspecto", concluyó García Remón.