NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Selección | Bosnia-España

Luis se lleva 22 aunque sólo podrá inscribir a 18

Cuatro estarán en la grada. Sus clubes podrían molestarse

Mikel Recalde
Actualizado a
<b>EN DEFENSA DE JOAQUÍN. </b>Un seguidor del Sevilla increpó a Joaquín durante el ensayo. Luis se acercó a la grada, habló con él y cerró la charla dándole dos cachetes amistosos.
PEPE ANDRÉS

Luis Aragonés decidió ayer llevarse a Bosnia a los 22 jugadores que ha convocado para trabajar esta semana en El Saler. Después de múltiples especulaciones y rumores, el seleccionador ha optado porque sean todos los internacionales los que viajen. La noticia suscitará mucha polémica, ya que en los encuentros oficiales para la clasificación para el Mundial 2006 sólo se pueden inscribir 18 jugadores, por lo que cuatro de ellos se tendrán que sentar en la grada del vetusto estadio de Zenica. Lo más probable es que los clubes de los descartados no tarden en mostrar su descontento, ya que no podrán contar con sus respectivos futbolistas hasta el jueves por la tarde o viernes, y varios de ellos disputan jornada de Liga el mismo sábado. Además, se trata de un desplazamiento molesto por las incomodidades tanto de desplazamiento como hoteleras.

Sorprendentemente, Luis Aragonés no quiso ofrecer pistas y escondió su decisión hasta después del entrenamiento de la tarde. El técnico ya había declarado la víspera: Yo quiero llevarme bien con los clubes y colaborar con ellos, aunque las leyes están para cumplirlas. Además, yo siempre que la Selección convocaba a de unos de mis jugadores me ponía contento porque lo consideraba como algo mío. No existe ninguna norma que determine que no puedan viajar con tantos jugadores, pero no parece una buena manera de fomentar las cordiales relaciones que planeaba tras su proposición de hacer una sentada entre todos los estamentos del fútbol español para lograr que la Selección pueda alcanzar el éxito.

Desde que aterrizó en el cargo, Luis Aragonés había mostrado su intención de hacer convocatorias de 22 jugadores para jugar partidillos a campo completo en los entrenamientos. Ésta suele ser una de las máximas del entrenador a lo largo de su dilatada carrera en la que casi siempre ha conseguido que los titulares y suplentes se encuentren satisfechos de trabajar a sus órdenes. El técnico, que reunió a los internacionales al final del entrenamiento y les comunicó su decisión, trata con esto fomentar la unidad del grupo, ya que descartar a cuatro jugadores que llevan trabajando toda la semana con gran intensidad les hubiese supuesto una decepción. Luis tiene en la cabeza crear el España FC y disponer de una plantilla para entrenar como la de cualquier club.

La realidad es que nadie se esperaba que se desplazaran todos a Bosnia, ya que, entre otras cosas, la previsión de la agencia organizadora era que la expedición en el viaje de ida estuviera compuesta sólo por 18 internacionales. En el viaje de vuelta, el jueves por la mañana, se unirá a la delegación la Sub-21, que juega hoy en Sarajevo.

Contra Bosnia televisa Antena 3

Antena 3 será la encargada de televisar mañana el partido Bosnia-España, y posteriormente repetirá con la transmisión del Lituania-España del 13 de octubre. La empresa Sportfive, propietaria de los derechos televisivos de los cinco partidos que la Selección debe jugar a domicilio en la fase de clasificación del Mundial, vendió los derechos de estos dos partidos de 2004 a Antena 3. Los tres que España jugará en 2005 como visitante (Serbia, San Marino y Bélgica) serán negociados en enero.

Bronca de Luis por las permutas

Luis Aragonés aprovechó el entrenamiento vespertino para volver a ejercitar el apartado táctico. El seleccionador, que no paró de corregir a sus pupilos, reconoció a pleno grito:al fútbol español le faltan dos cosas: nos movemos mal y las permutas. Luis trabajó los córners y faltas laterales, a favor y en contra, y ensayó una nueva jugada de estrategia en defensa, la clásica salida de la zaga antes del saque de una falta lateral para que el rival caiga en fuera de juego.