El técnico del Liverpool, el español Rafael Benítez, que vio ganar a su equipo por 2-0 sobre el Graz AK en la fase previa de la Liga de Campeones, explicó que la única razón por la que no optó en el once inicial por Michael Owen fue, "simplemente", porque se decantó por el checo Milan Baros.

El Liverpool protegió sus intereses y dejó a Owen en el banquillo. Sin embargo, Rafa Benítez, no quiso verlo así. E intentó mandar otro mensaje. Situó arriba en Austria a Baros y a Djibril Cissé y el técnico madrileño insistió en que el motivo de su decisión no estuvo de ningún modo vinculado a la supuesta marcha del inglés.

"Siempre escojo a los mejores jugadores en el once inicial y decidí que Owen no estuviese esta vez", comentó Benítez. El ex del Valencia subrayó que se trató de algo "simple", dijo. "Elegí a Baros para jugar. Tengo cuatro delanteros y decidió empezar con él. De las cuatro posibilidades que tengo, me decanté por ésta. (Owen) no jugó porque lo hizo Baros. Y Baros jugó bien".

La enorme expectación centrada en los numerosos rumores que rodean a Michael Owen empañaron el convincente debut de Benítez en el primer partido oficial como entrenador del Liverpool. "Steven Gerrard marcó dos buenos goles", recordó el técnico. "Estoy contento, siempre lo estoy cuando mis equipos ganan. Este ha sido nuestro primer partido y ellos (el Graz) ya habían jugador cuatro partidos de liga y son conocidos por ser un equipo fuerte y que presiona", explicó el entrenador, que remarcó que sus hombres, en Austria, mantuvieron "una buena concentración, lo que me pone muy, muy contento".

Entretanto, en Inglaterra como en España, se vive con enorme expectación la resolución del caso Eto'o, una operación a tres bandas, que terminaría con el camerunés en el Liverpool en lugar de irse al Barcelona y con Owen en el Real Madrid.