El Real Madrid ha conseguido su segunda victoria en su gira por Japón ante un equipo con jugadores veloces y descarados, pero que se ha encontrado a la mejor versión del equipo español. De hecho, el conjunto blanco ha mostrado un conjunto equilibrado sobre el terreno de juego y con numerosas variantes ofensivas que han conseguido poner en práctica hasta que han fallado las fuerzas.
El partido ha empezado bien para el Real Madrid, que no ha querido dar la posesión a sus oponentes y se ha hecho con el balón en un centro del campo que esta vez ha estado ocupado por David Beckham e Iván Helguera. Pero quien más ha aportado a esta parcela ha sido Zinedine Zidane. El francés ha puesto su calidad al servicio de la organización y ha acudido en numerosas ocasiones a la zona de distribución para ayudar a llevar el balón hasta Ronaldo, en un partido en el que han destacado los dos hombres que debutaban en la gira asiática.
Además, el marsellés ha tenido uno de sus partidos destacados en el que ha arrancado las ovaciones de un público entregado con sus controles y pases. Sin embargo, no todo ha sido bueno para el francés, puesto que una dura entrada del japonés Hayasho le ha llevado al vestuario de forma prematura. No obstante, Zidane ya se ha tomado la justicia por su mano golpeando a su rival con el puño desde el suelo.
Buen juego del Real Madrid
En cuanto a las ocasiones, éstas han llegado desde los primeros minutos gracias a las buenas combinaciones en el centro del campo. Desde la derecha, Figo ha demostrado que no ha perdido su instinto regateador y desde la izquierda Solari y Roberto Carlos se han deshecho con facilidad de la rapidez de los voluntariosos defensas nipones.
Una vez llegado el primer gol, una magnífica acción de Zidane quien se marchó con su ruleta entre dos jugadores y tumbó al portero con una bicicleta- el partido se ha desarrollado muy a favor del Real Madrid. Los futbolistas del conjunto español han aprovechado para exhibir su técnica con toda una serie de suertes y gestos de habilidad y precisión ante el agradecido público nipón.
Precisamente, al Real Madrid le ha faltado querer culminar sus jugadas, ya que han optado antes por rizar el rizo que por el disparo a puerta. Sólo un regalo del portero japonés a Ronaldo después de que el brasileño ganara la espalda a la defensa japonesa ha permitido llevar el segundo al marcador.
Juego al gusto de los blancos
Así ha transcurrido la primera y en la segunda parte, con jugadas tan brillantes como el cuarto gol, un contragolpe a gran velocidad de los blancos con pases al primer y al segundo toque Figo, Guti, Raúl- que ha finalizado Morientes empujando a la red. Antes, Figo ya había conseguido marcar un gol con un disparo desde el borde del área cruzado ajustado que había buscado durante todo el partido con varios lanzamientos desde fuera del área.
En los últimos minutos, el equipo español se ha limitado bajar el ritmo y a jugar el balón hasta ver la ocasión que proporcionaban los desanimados y desacertados japoneses que han ido de más a menos desde que han recibido el primer gol. En esta segunda parte Guti no ha destacado tanto como en el anterior partido y Raúl ha participado menos que Zidane. La entradas de Mejía y Celades han sido testimoniales.
