La decisión de la UEFA de abrir expediente disciplinario al presidente de la Federación, Franco Carraro, y al guardameta titular del equipo azzurro, Gianluigi Buffon, por poner en tela de juicio la ética de los internacionales de Dinamarca y Suecia, aumentó la sensación de rabia y de impotencia en los italianos. Buffon dijo: Alguien tendría que estar avergonzado de lo que ha sucedido. Carraro no le fue a la zaga: No hay duda de que, visto el desarrollo del partido entre suecos y daneses, los dos equipos buscaban empatar a dos.

William Gaillard, portavoz de la UEFA, anunció ayer la apertura del expediente a Carraro y Buffon: Si somos exigentes con los seguidores para que tengan un comportamiento deportivo, lo hemos de ser mucho más con los deportistas y con los dirigentes.