La Federación Inglesa de Fútbol (FA) ha sancionado con seis partidos de suspensión y una multa de 10.000 libras (16.000 euros, unos 2,6 millones de pesetas) al centrocampista del Leeds Lee Bowyer por haber ofrecido una mala imagen del mundo del fútbol.
Bowyer estaba acusado de haber asestado el año pasado un codazo al centrocampista del Liverpool Gary McAllister, en el transcurso de un partido de Copa de Inglaterra, así como de haber insultado al árbitro de un partido contra el Arsenal en agosto en Highbury, después de que aquel le acabara de expulsar por dos tarjetas amarillas.
Su compañero Danny Mills, defensa internacional Sub-21, también ha sido sancionado con dos partidos de suspensión y condenado a pagar una multa de 7.500 libras (12.000 euros, unos 2 millones de pesetas), por las palabras que dirigió a un árbitro tras su expulsión durante el mismo encuentro contra el Arsenal.
De esta manera, los dos jugadores se perderán el partido amistoso contra Holanda, previsto para finales de mes. Esta nueva suspensión no mejorará la imagen de Bowyer, que, sospechoso de haber participado en la agresión de un estudiante asiático en enero de 2000, fue declarado inocente por el tribunal del Leeds a mediados de diciembre.
