Lopetegui y Guardiola en noche decisiva

El Barça recibe al Paris Saint Germain, pero con tan sólida ventaja (3-1) conseguida a domicilio que la atención se nos va a Múnich, al Bayern- Oporto. Un partido en el que muchos nos resultan familiares, empezando por los entrenadores, Guardiola y Lopetegui, aunque no sólo ellos. El partido de ida también fue 3-1, pero en este caso a favor del de casa. Un resultado bastante bueno para el Oporto, un listón alto para el Bayern de Guardiola. A éste el partido le llega en un momento delicado, cuando no todos en el club (o casi nadie) aprueba su conflicto con el equipo médico, tan mal resuelto.

Lopetegui está ante una gran ocasión. Me lo represento como el joven pistolero que puede alcanzar fama eterna en el duelo con una celebridad. Lopetegui tiene un buen palmarés en las selecciones inferiores españolas, donde manejó con buen estilo y estupendos resultados la generación siguiente a la que nos dio tantas glorias. Cansado de ese fútbol digamos ‘meritorio’, se ha echado al ruedo de los grandes clubes. Desde el Oporto lucha contra el Benfica y de paso se foguea en la Champions, o algo más. Con ese 3-1 de la ida, no es descartable verle en semifinales, y eso ya sería un gran logro.

Eso metería en serios apuros a Guardiola, en estos días delicados. El año pasado ya sufrió el trueno de la brutal eliminación ante el Madrid, pero era su primer año. Este es el segundo, y aunque va a renovar con seguridad el título de Liga, eso en el Bayern se da por descontado. En dinero e influencia el Bayern no tiene quien le haga sombra en Alemania. Casi puede decirse que su problema en Europa es justamente ese, que dentro de Alemania le falta verdadera exigencia en la mayoría de los partidos. En Oporto cometió fallos infantiles. El de hoy es un partido clave para Guardiola.