Isco aclamado con Torres a la espera

El Madrid enseña músculo. Ayer reunió seis mil personas en una tarde gélida para presenciar el entrenamiento y, de paso, contemplar las copas ganadas en 2014, entre las que brilla la Champions, reconquistada doce años después. El júbilo con el que acudió tan numeroso público familiar hace añorar aún más la ausencia de fútbol en estas fechas. Se nota que hay ganas y aquí tenemos clima para jugar en invierno. Si en Inglaterra pueden y lo hacen... El público se calentó las manos aplaudiendo y comprobamos una vez más que Isco se ha convertido en el favorito de las grandes mayorías.

El Madrid adelantó el regreso porque juega mañana en Dubai contra el Milán. Y no, no será Trofeo Bernabéu. Esa fue, fácil era adivinarlo, nuestra inocentada de ayer. Por primera vez desde 1979 no habrá Trofeo Bernabéu, eliminado con un perverso silencio. El Barça mantiene el Gamper a pesar de no resultarle rentable, porque tiene una muy otra forma de mirar y respetar su historia. Al afán adanista del florentinato le estorba visiblemente el gran referente de la historia del club. Esta eliminación a cencerros tapados del trofeo que lleva su nombre es un detalle mezquino que afea este gran año.

Un año que aún puede destilar otro premio, aplazado pero importantísimo, el Balón de Oro. Cristiano Ronaldo es favorito en las apuestas. Ayer se les echó en falta a él y a Benzema en el entrenamiento festivo, pero es que ellos han pasado estos días precisamente en Dubai y tenían permiso para esperar allí, como espera el Milán. Con él sigue El Niño Torres, que participará junto a Gil Marín en alguno de los actos del ‘Globe Soccer’, una especie de congreso-farándula que organiza allá Mendes. Pero no es de esperar que juegue contra el Madrid mañana. ¿Y en el doble derbi copero? Ahí sí se le espera.