Alemania, modelo de alternancia

Alemania, modelo de alternancia

Alemania celebra cada año su GP de F-1 pero no en el mismo circuito. Existe alternancia entre dos escenarios clásicos: Nurburgring y Hockenheim. Es así porque la situación económica no permitía que los dos tuvieran su carrera, durante años convivieron con la propia denominación de GP de Alemania y de Europa. Pero llegaron las vacas flacas y desde 2008 asumieron el compartir protagonismo. Y hablamos del motor económico de Europa y una potencia mundial, así que parece evidente que si ellos lo hicieron a otros no les quedará más remedio...

Entre esos otros estamos nosotros, los españoles. Tener dos grandes premios por campaña era un lujazo que resultaba insostenible. Que la F-1 genera riqueza es evidente. El problema es que las arcas públicas no están en disposición de financiar ese gigantesco mecanismo, así que no queda otra que seguir el modelo alemán. Lo fundamental es que España siga teniendo F-1, que los organizadores sobrevivan y los aficionados disfruten de ese espectáculo. Que sea en Barcelona o en Valencia ha pasado a ser, en la coyuntura actual, una cuestión menor.

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