Luto en el Zaragoza por la muerte de Javier Paricio
Mano derecha de Waldo Marco en la etapa de los ‘Magníficos’ y director general con Alfonso Soláns.
Luto en el Real Zaragoza. Javier Paricio, directivo, consejero, director general y asesor presidencial durante casi dos décadas repartidas en tres etapas, falleció el domingo por la noche en la capital aragonesa a los 82 años de edad víctima de una cruel enfermedad. Actor principal en los dos periodos más exitosos de la historia del club, el de los Magníficos y el de los Héroes de París, tuvo la inmensa satisfacción de observar desde la sala de máquinas de La Romareda como el Zaragoza conquistaba seis de sus nueve títulos.
Francisco Javier Paricio Agüeras nació en Zaragoza el 22 de septiembre de 1934 y desde muy joven sintió una enorme atracción por el fútbol. Dirigente precoz, con 25 años formaba ya parte de la junta del Juventud Club de Fútbol, entidad filial del Real Zaragoza. En 1962 entró como vocal en la directiva de Waldo Marco y muy pronto se convirtió en la mano derecha del gran presidente de los ‘Magníficos’. En aquel periodo mágico e irrepetible (1962-67), el Zaragoza disputó seis finales –cuatro de Copa y otras dos de la Copa de Ferias- y obtuvo los tres primeros títulos de su historia.
En 1986, Paricio volvió a la primera línea del fútbol cuando Miguel Beltrán lo incluyó como vocal en la candidatura que venció en las elecciones a la presidencia a la de Félix Baztán. Y seis años más tarde, tras la conversión del club en sociedad anónima deportiva, se convirtió en el primer director general del Real Zaragoza, de la mano de otros de sus grandes amigos, el presidente y máximo accionista Alfonso Soláns Serrano. Y en ese puesto, desde donde vivió el triunfo en la Recopa, se mantuvo hasta 1999, cuando pasó a ser asesor presidencial de Alfonso José Soláns Soláns. En 2002 se retiró a sus cuarteles de invierno, entre Zaragoza y Zarauz, pero no dejó de estar pendiente de su equipo.
Socio del Real Zaragoza desde el 1 de agosto de 1949, era en la actualidad el abonado número 23 del club aragonés
Javier Paricio será enterrado esta mañana en el cementerio católico de Torrero en la más estricta intimidad y por la tarde tendrá lugar un funeral en la iglesia de los Padres Jesuítas, el colegio en el que se educó. Nosotros, que disfrutamos de su amistad hasta sus últimos días, escribimos hoy con brazalete negro por su memoria. Descanse en paz.
