El Mirandés consigue salir del pozo y mete al Almería
Ortiz y Maikel consiguieron darle la vuelta al gol de Quique en el minuto 47. Los rojiblancos abren la zona de descenso con un punto menos que los burgaleses.
Se presumía un duelo entre Mirandés y Almería con mucha tensión por la necesidad clasificatoria de ambos equipos y no demasiado fútbol. Y es lo que pasó. Sin llegar a tomar precauciones los dos conjuntos, sí que hubo cierta precipitación en el pase final por ambos lados, lo que se tradujo en muchos pases errados y más recuperaciones si cabe. En el debut de Claudio como técnico local sus pupilos comenzaron mandando y acercándose a la portería de Casto en un par de situaciones. Puso de inicio el preparador levantino a Ruper por delante de la defensa de cuatro y luego otra línea de cuatro centrocampistas para con la velocidad de Sangalli y Guarrotxena por las bandas y la movilidad de Maikel Mesa tratar de sorprender al conjunto andaluz.
Pero lejos de encerrarse en su campo los de Soriano empezaron a merodear el área local con hasta cuatro y cinco futbolistas de una vez. Nano puso a prueba a Roberto antes de que el cancerbero tuviera que lucirse de verdad a un cabezazo de Azeez. Algo temeroso el Mirandés sólo tuvo un remate mordido, justo antes del descanso, de Fran Cruz que Casto envió a corner.
El mazazo para los de Anduva llegó al comienzo de la segunda parte. Un pase medido en profundidad de Juanjo lo resolvió Quique por debajo de las piernas de Roberto para aumentar su cuenta goleadora hasta las ocho dianas. Pero esta vez el Mirandés no se vino abajo. Reclamaba horas antes su entrenador mayor capacidad de reacción a los suyos ante la adversidad y éstos la tuvieron. Así, Alex Ortiz empató sobre la misma línea de gol tras un saque de esquina que despejó la defensa almeriense en primera instancia y Guarrotxena empaló antes de tocar el sevillano.
El encuentro se abrió y el Almería pudo marcar de nuevo, aunque Quique se encontró en dos ocasiones con un excepcional Roberto. Los reflejos le permiteron desviar sendos remates a bocajarro del pucelano dentro del área pequeña. Y cuatro minutos después Maikel Mesa cabeceó sólo una falta protestada por todo el banquillo visitantes y que ejecutó Kijera. A partir de ahí el Mirandés tiró de garra para defenderse como buenamente pudo y certificar un triunfo que le saca del descenso y que manda a su rival de ayer a dichas posiciones.
