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OSASUNA 0 - ATLÉTICO 3

Uno por uno del Atleti: Oblak templa los nervios de Giménez

El esloveno cambió el signo del partido en el minuto 13, tras pararle primero el remate a Kodro y después el penalti a Roberto Torres. Tras el gol de Godín, el panorama cambió por completo.

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Uno por uno del Atleti: Oblak templa los nervios de Giménez

Oblak. El esloveno cambió el signo del partido. Providencial en el 13’, ya no sólo por el penalti que le paró a Roberto Torres, sino porque también segundos antes le detuvo a Kodro un remate a bocajarro dentro del área. El meta volvió a sumar puntos para el Atlético con sus manos y demostró que no tiene un problema con los penaltis. En juego, ha parado 4 de 8 en el Atlético.

Juanfran. Se asoció bien con Gabi para subir por la derecha. En el primer tiempo llegó un par de veces con claridad, pero sus centros no fueron buenos. Jugó más cómodo tras el descanso y, de nuevo, tras una conexión con Gabi puso una pelota rasa de gol que Koke no llegó a rematar.

Giménez. Acelerado. Evidenció nervios cuando empujó por la espalda en el área a Riera cometiendo penalti en un centro lateral. Después, se volvió a equivocar yendo al suelo en la línea de banda ganándose la amarilla por una entrada a destiempo sobre Berenguer. Va al límite, intentando marcar la diferencia en cada acción, pero a veces no evalúa los riesgos. Su valentía está fuera de dudas, y en el juego aéreo sí se mostró contundente e incluso apareció bien al corte un par de veces en el segundo tiempo.

Godín. Muy exigido e incluso agobiado en tramos de la primera parte, donde Osasuna buscaba el área con insistencia. El estrés le pudo en algún despeje errático y en una jugada en la que Kodro le superó a él y a Giménez. Se recompuso de forma brillante, con oficio y carácter, apareciendo en el área rival para romper la mala racha del equipo a balón parado con su cabezazo y para sacar de un apuro al Atlético.

Lucas. Intenso, sólido en defensa y muy concentrado. Cuando subió no lo hizo tampoco mal. Duro por momentos, cuando hacía falta, sumó otro partido sin despistes en una posición que no es la suya. Simeone apostó por él para sustituir a Filipe y no el francés no falló.

Koke. Jugó con mucha libertad en la primera mitad. Partiendo desde la izquierda aparecía constantemente por toda la zona de tres cuartos incrustándose en el medio. Empezó bien entrando bastante en juego, pero perdió control y el Atlético lo sufrió. Los dos goles tumbaron la voluntad rojillla y su partido fue, desde ahí, más plácido.

Tiago. Caparrós puso a Oriol Riera sobre él dejando que fueran los centrales colchoneros los que sacaran la pelota. Poco a poco fue encontrando el espacio para recibir y mandar. Durísimo en la entrada sobre Causic. Tras el gol de Godín comenzó a mandar claramente en la zona ancha y el Atlético ya no pasó apuros.

Gabi. Jugó con especial atención a lo que pasaba a su derecha, concentrado para guardar la espalda de Correa y para apoyar a Juanfran. Sin errores de bulto en el pase, ya con el marcador a favor, supo moverse bien y relacionarse con Tiago para sacar limpia la pelota y liquidar lo que quedaba de presión navarra.

Correa. Como en Sevilla la había vuelto a tener para desnivelar el marcador, pero no acertó a convertir en gol el magnífico pase de Griezmann. Le costaba entrar en juego y amenazar, pero filtró un maravilloso pase sobre Gameiro para dejar casi decidido el partido. Fue apareciendo más, pero demasiado recluido en el carril. Apenas pudo girarse y dividir por el centro, como a él le gusta.

Griezmann. Muy inspirado en el pase, moviéndose con muy “mala intención” tras la medular navarra. Así le puso un balón de oro a Gameiro y otro igual de bueno a Correa, ambos fallaron. Generoso a la hora de buscar a sus compañeros, solidario en el trabajo, pero sin presencia en las zonas de gol. Se torció el tobillo derecho al poco de empezar el segundo tiempo y a cinco minutos del final Simeone le sustituyó.

Gameiro. Como ante el PSV, comenzó falto de precisión y en el minuto 2 marró un remate al primer toque ante Nauzet. El error no le atenazó y volvió a esperar su momento. En el 36’ volvió a tirar un desmarque magnífico a la espalda de la zaga rojilla. En jugada calcada a la del PSV, Correa le habilitó con un pase bombeado y Gameiro recibió en carrera y resolvió fuerte con la derecha. Suma dos partidos seguidos marcando.

Carrasco. Entró por Correa para jugar en la izquierda. En una de sus primeras acciones pisó el área y su pase lo cortó Oier con la mano. Se estiraba poco el equipo en la recta final, pero castigó sin piedad el error de Unai. El defensa se hizo un lío, el belga robó para plantarse en el área y batir a Nauzet.

Saúl. Simeone mató completamente el partido con su entrada. El Atlético pasó a jugar con 5 centrocampistas limitándose a dejar pasar los minutos. Arrimó el hombro para terminar de acabar con la resistencia de Osasuna ubicado a la izquierda de Tiago.

Thomas. Saltó al campo para dar algo de descanso a un Griezmann tocado. Apenas tuvo cinco minutos.