El hondureño regresó ayer a la isla tras su experiencia olímpica. “Quiero estar el viernes, y espero que el míster me de la oportunidad de jugar", aseguró.
El motivo por el que Anthony Lozano no estuvo hasta ahora entrenando con el Tenerife es que estaba en Río participando en los Juegos Olímpicos. Contra todo pronóstico llegó hasta el final con opciones de medalla. “Fuimos la gran sorpresa del torneo”, contó el hondureño. “A pesar de no lograr el bronce, nadie daba nada por nosotros”, destacó. Su selección dejó en el camino a Argentina en la fase de grupos y luego eliminó a Corea del Sur. En semifinales, cayó goleada por Brasil, a la postre el campeón, y por el tercer y cuarto puesto, no pudo vencer a Nigeria (3-2), quedando en cuarto lugar. En ese encuentro, el Choco anotó uno de los goles y sumó tres en todo el torneo. “Vengo con mucha confianza, con ganas y eso se sobrepone a todas las cosas”, explicó. Fue un hito histórico para su país ya que ningún equillo centroamericano de fútbol había llegado tan lejos en unos Juegos.