SEMIFINAL | ALEMANIA - FRANCIA
Neuer reta hoy a Griezmann
Los alemanes, con bajas hoy (21:00 Tele5). El atlético es la baza local. Francia no gana a los alemanes en una gran cita desde hace 58 años.
No habrá gloria ni hueco en la final para el anfitrión o para el campeón del mundo. Uno de los dos se quedará a las puertas del título cuando la Eurocopa enfila su penúltima estación, ya sumidos todos en el calor pegajoso de Marsella. Franceses y alemanes se miden en un duelo que suena a cosa grande. Mejor no hacer planes esta noche.
Por fin la Francia de Deschamps cogió altura en cuartos ante Islandia y eso ha levantado el entusiasmo local. Si alguien propició el despegue ese es Griezmann, el príncipe con cara de niño que ya ha sido proclamado por todos rey de Francia. Sus cuatro goles en el torneo le convierten en una de las figuras indiscutibles. Deschamps se dio cuenta de su influencia y alteró el dibujo por y para él. Bien hecho. En el 4-2-3-1 actual se siente más liberado, muy al estilo del Griezmann del Atlético de Madrid. Hoy vuelven Rami y Kanté tras cumplir sanción, aunque el verdadero dolor de muelas de Deschamps y los franceses es cómo hacer frente a una Alemania inabordable.
Bestia negra. Hace 58 años que los franceses no derrotan a su rival germano en un gran torneo y el último precedente es de los cuartos del Mundial de Brasil. Francia juega en Marsella, eso sí, allá donde derrotó a Portugal en la semifinal de la Euro 84 que después acabaría conquistando. Los Griezmann, Payet y Giroud de hoy querrán ser los Platini, Giresse y Lacombe de entonces. Neuer hará de muro en la portería germana para evitarlo. Casi nada.
Alemania, que juega su novena semifinal en 15 Eurocopas, hará cambios. Las bajas por sanción de Hummels y por lesión de Khedira y Mario Gomez obligan a Löw a estirar la toalla. Aparecen ahí imberbes como Sané, además de otros ya asentados en el once como Kimmich o Draxler. Son jóvenes, pero alemanes. Lo de competir les viene de serie. Eso busca precisamente Alemania: ganar para aspirar al doblete. Si deja a la anfitriona en la cuneta, lo tendrá muy cerca.
El último precedente, en los atentados de París
La última vez que jugaron franceses y alemanes fue un amistoso en Saint-Denis el pasado mes de noviembre. Ganó Francia 2-0 con goles de Giroud y Gignac, pero el partido pasará a la historia porque ese mismo día se produjeron una serie de atentados en París que también tenían el encuentro entre ambas como uno de sus objetivos. De hecho, la imagen del momento en el que sobre el césped se escucha cómo un terrorista suicida se inmola a las puertas del estadio dio la vuelta al mundo. La posterior evacuación de los espectadores previo paso por el terreno de juego también marcó el encuentro. Aquel trágico suceso unió mucho a franceses y alemanes, aunque hoy, siempre con el objetivo deportivo como única premisa, serán encarnizados rivales.
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