Portugal aún confía en Cristiano
El búnker luso en Marcoussis rezuma confianza. “Lleva el peso de once millones de portugueses”, dicen los medios de su país.
Cristiano sonríe y los disparos de los fotógrafos le acompañan. Que el crack madridista cambie de semblante después de su aciago partido ante Austria es la mejor noticia posible para Portugal. Lo saben en el búnker luso en Marcoussis, donde técnicos, compañeros y periodistas están pendientes de cada uno de sus detalles. “Un Cristiano alegre es una Portugal alegre”, cuentan varios seguidores que se agolpan a las puertas de la ciudad deportiva en la que se ejercitan sus ídolos. Llevan viniendo varios días y aún no han podido conseguir el autógrafo por el que luchan.
Son franceses de nacimiento, pero portugueses de sangre. “Aquí en Francia la inmigración mayoritaria es de Portugal”, recuerdan con gracia pese a la fina lluvia que les cae encima. “No hay que preocuparse. Cristiano marcará dos o tres goles ante Hungría”, explica el más vehemente de ellos, con una foto de su ídolo colgada del pecho.
Dentro del campo base portugués el optimismo también es notorio. La visita familiar que Cristiano recibió el domingo parece haber activado su ánimo. Estuvieron su madre y su hijo, algo que definitivamente le ha cargado las pilas. Después de dos empates ante Islandia y Austria, la posibilidad de ser primeros de grupo aún existe para Portugal si gana a Hungría. Cristiano lo sabe y ya está centrado en ello.
Esperanza. Los medios también han levantado la bandera de la ilusión, pese a todo. “El problema de Cristiano es que lleva a once millones de portugueses a sus espaldas”, dice el relator televisivo de SIC TV Gonçalo Azevedo Ferreira. “Tiene un poco de ansiedad, es normal. Pero se la quitará ante Hungría”, le secunda Janete Frazao, de CMTV. Estos días se recuerda una metáfora que el mismo Cristiano hizo en el Mundial de Sudáfrica en una situación parecida a la actual: “Hacer goles es como echarte el ketchup. Al principio cuesta sacarlo; luego ya sale solo”.
Lo que es un hecho es que comparar al Cristiano del Madrid con el de Portugal es tarea perdida. Con los blancos suma 364 goles en 348 partidos oficiales, mientras que con su selección lleva 58 tantos en 128 encuentros. La posición en la que Fernando Santos le está colocando últimamente, casi como nueve de área, tampoco ayuda. Aún así, Cristiano está con hambre, recuperado, sonriente. Y eso a Portugal le sabe a gloria.
André Gomes podría ser baja
El entrenamiento de Portugal en Marcoussis contó con la ausencia de dos jugadores que están siendo importantes en los planes de Fernando Santos: Raphael Guerreiro y André Gomes. El lateral izquierdo está sobrecargado y descansó para evitar mayor volumen de trabajo en sus piernas; más problemático parece lo del centrocampista del Valencia, que también tiene molestias musculares pero además acompañadas de una fatiga que dejó patente en los últimos minutos ante Austria. El valencianista podría dejar por ello su puesto en el once inicial mañana en el partido decisivo ante Hungría. La opción mejor colocada para suplirle es Adrien Silva, del Sporting.
