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VILLARREAL 0 - DEPORTIVO 2

Faycal y Lucas Pérez sellan la permanencia del Deportivo

Marcaron los dos tantos del Deportivo en El Madrigal para certificar la salvación matemática tras una irregular segunda vuelta en la Liga.

Actualizado a
Faycal y Lucas Pérez sellan la permanencia del Deportivo
LALIGA

El Deportivo dio por finalizada su angustia y certificó la permanencia en Primera con una solvente victoria ante un Villarreal tocado por el drama de la Europa League y que ya no se jugaba nada con la Champions atada. Los coruñeses aparcaron los nervios y mostraron una cara que recordó mucho al equipo de la primera vuelta. Bastan dos datos para demostrar el cambio: dejó su puerta a cero por primera vez en 20 partidos y consiguió ganar lejos de Riazor seis meses después.

El Depor salió desde el pitido inicial con tres ideas muy claras. La primera, demostrarle al Submarino quién se jugaba algo, y el mensaje lo envió Luis Alberto con un balón al palo a los tres minutos. Segunda, un ritmo bajo de partido para que sucediesen las menos cosas posibles. La tercera, no perder balones en zona de riesgo, mucho orden y balones largos a Lucas.

Los coruñeses, que no echaron de menos a Borges y Navarro, lo hicieron todo bien ante un Villarreal que aún tenía la cabeza en Anfield, pero la calidad de los de Marcelino bastó para hacer trabajar a fondo a un acertado Manu, al que Adrián y un activo Baptistao probaron hasta en tres ocasiones.

El plan del Depor, al que le podía valer el empate, se convirtió en magnífico pasada la media hora. Tras rozar Lucas el gol después de un gran pase de Mosquera, Fayçal se sacó un derechazo soberbio desde fuera del área que sorprendió a Barbosa. Alivio total, aunque todavía quedaba una hora de partido para delante por sufrir.

El segundo tiempo se inició con los mismos parámetros y el Depor tardó muy poco en que el ‘plan Lucas’ funcionase. El coruñés cazó un despeje de Luis Alberto para convertirlo en una carrera hacia el gol, en un sprint hacia la salvación. Llegó solo ante Barbosa y con su zurda clavó el tanto de la tranquilidad para los blanquiazules.

El 0-2 le pareció excesivo a Marcelino, que tiró casi de golpe de Denis, Bakambu y Dos Santos. El equipo despertó de golpe, con un remate al palo de Baptistao, pero el Depor, que cerraba todos los pases interiores, logró ir durmiendo poco a poco de nuevo el partido, aunque bajo un acoso constante del Villarreal. Y así se llegó al final en el que, sin que sirva de precedente, todo el mundo aplaudía. Marcelino y su afición, para celebrar la enorme temporada del equipo. Víctor y la suya, por poner fin a un sufrimiento que nunca debió llegar tan lejos.