Denis y Bakambu tumban al Getafe y acorralan a Escribá
El Villarreal afianza el cuarto puesto y hunde a su rival en la tabla. El extremo encarriló el partido en el 15’ y el congoleño, 20 goles en lo que va de curso, sentenció en el 85’.
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- Partido de Champions League, clasificación Mónaco-Villarreal en directo .
Si el Villarreal ya tiene la participación en la próxima Champions en el bolsillo es, sobre todo, porque es más duro que una roca. Sigue volando como el segundo equipo menos goleado de la Liga y presume con 22 encuentros sin encajar en todas las competiciones.Si el Getafe agoniza es, en gran parte, porque marca menos que nadie en Primera (28). El enfrentamiento entre ambos, más allá de las caras y los suspiros, no se correspondió durante muchos minutos con los 32 puntos que les separan. Las diferencias reales, de juego y empaque, quedaron patentes con la llegada del segundo tiempo. Lo que quedó claro es que al Submarino le quedan dos meses para disfrutar y que lo que espera al Getafe es para preocuparse. Próxima jornada, Real Madrid. Lo de Escribá es ya una agonía.
Lo mejor que pudo hacer el Villarreal es tomarse el encuentro como una final. Pese a que el jueves se la juega en la Europa League, Marcelino sólo hizo cuatro cambios, sorprendiendo al nombrar a Asenjo portero titular. La primera vez que al equipo amarillo le dio por triangular, desarboló a la defensa del Getafe. Adrián conectó con Denis y éste, que siempre es el que mejor trata el balón, se deshizo de Pereira para fusilar a Guaita. El extremo gallego, cada día más cerca del Barça, recordará su paso por el Villarreal por haber añadido a su repertorio la ambición y el olfato de gol. Buenas artes para desbancar a Munir. El Getafe, hundido en la tabla, pudo entonces rendirse. No era peor y, sin embargo, ya iba por detrás de nuevo. Pero decidió reponerse. Desde ese minuto 15 jugó su mejor fútbol. Bien plantado, con precisión en medio campo y con dos extremos, Pedro León y Sarabia, afinados. El Getafe se esforzó sin éxito por empatar. El Villarreal, impreciso, sólo lograba deshacerse del dominio cuando Bruno, Denis y Adrián se encontraban. Baptistao sigue distraído. Así, en uno de estos ataques en el que el balón circula con rapidez de banda a banda, Castillejo pudo encarrilar la victoria. Lástima que se le dé mejor vaciarse que definir.
Pese a las urgencias, el Villarreal fue creciendo en el partido mientras que el Getafe, corto de físico pese al preparador que Ángel Torres ha impuesto esta semana, se fue encogiendo hasta desaparecer. Nada de hambre y poco amor propio. Es lo que tiene pensar en el futuro cuando vienen nubarrones. Mario, Adrián y Castillejo pudieron hacerle añicos. Y Escribá, mientras, no aportaba soluciones. Se le acaban las razones para justificar su continuidad. La mejor ocasión del Getafe fue de Bruno, imagínense, que en su ímpetu por cortar una jugada en defensa puso a prueba a Asenjo con un sorprendente disparo. Con muchos minutos aún por delante, llegaron los cambios. Los del Getafe no mejoraron a su equipo. Más bien lo estropearon. Los del Villarreal le dieron más chispa y mantuvieron la solidez. Sarabia probó de volea en la única aproximación con maldad. Pero fue Bakambu quien estuvo fino. Fue en un córner, tras peinar Mario por quinto saque de esquina seguido (¿quién le marcaba?) y ganar la posición en claro fuera de juego.
Con el 2-0, el Villarreal sonrió aliviado, tras recordar que el Sevilla se ha caído de la lucha por la Champions y que el jueves llega a una final en Praga repleto de optimismo. Las caras del Getafe camino de los vestuarios eran bien distintas. Todo un poema. El descenso ha pasado de ser una posibilidad olvidada a convertirse en toda una amenaza.