Filipe Luis recupera su mejor versión en su regreso al Atlético
El brasileño ha recuperado en nivel con el que se marchó al Chelsea y ya ha disputado 34 partidos de rojiblanco como titular. Con Brasil jugó los dos partidos completos.
Filipe Luis se marchó en el verano de 2014 al Chelsea, acompañado por Diego Costa y Courtois, a cambio de 20 millones tras haber ganado una Liga épica y rozado el título de Champions con el Atlético. El brasileño había participado en 32 partidos de Liga, 10 en Champions, 5 de Copa del Rey y dos de Supercopa de España para un total de 49 encuentros, anotando un gol y jugando 4.272 minutos en los que fue una pieza básica en el inicio de los ataques rojiblancos.
Filipe llegaba al Chelsea como uno de los mejores laterales izquierdos del mundo, posición el la que el Atlético sufrió mucho durante la temporada pasada, donde Simeone probó al inicio de temporada a Ansaldi y después alternó entre Siqueira, mejor ofensivamente aunque con carencias atrás y Jesús Gámez, cumplidor a pierna cambiada. Por su parte, el brasileño tan sólo disputó 26 partidos, 20 de ellos como titular y se quedó en 1.883 minutos durante su etapa inglesa.
El pasado verano se convirtió en una de las prioridades de Simeone, que ansiaba la vuelta del lateral que tan buen resultado había dado en sus cuatro temporadas en el Atlético, dos y media con el técnico argentino. Tras pagar 16 millones por un futbolista que cumplía 30 años, las dudas se centraron en saber como respondería de nuevo en la máxima exigencia que suponía recuperar la titularidad. Con un inicio de curso dubitativo, Filipe ha recuperado el mejor nivel y ya ha vuelto a ser imprescindible para el Atlético. Ha jugado ya 34 partidos, todos ellos como titular, supera los 3.000 minutos (3.044) y ha vuelto a bascular el ataque del Atlético a la banda izquierda, donde ha creado una gran pareja con Carrasco. Ha marcado un gol, repartido tres asistencias y forma parte de la mejor defensa de Europa, que puede llevar a Oblak a ser el mejor Zamora de la historia. Además es un fijo en la selección brasileña, donde ha disputado los partidos completos contra Uruguay y Paraguay. Curiosamente conservó su presencia con Brasil cuando menos minutos tenía en el Chelsea tras haber estado entre 2009 y 2013 sin ir pese a su gran rendimiento.
El único borrón que se le puede poner a su temporada a Filipe es la tarjeta roja que vio en el Camp Nou por un plantillazo sobre Messi. Algo de lo que podría redimirse la próxima semana, donde el Atlético disputará la ida de los cuartos de final de Champions en el feudo blaugrana. El brasileño ya fue clave para que los rojiblancos estén en cuartos después de haber anotado el séptimo penalti en la tanda de octavos contra el PSV, el anterior a que Juanfran cerrase el partido y clasificase al equipo rojiblanco.