NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

SELECCIÓN SUB-19

Los goles de Aarón y Mayoral guían a España contra Grecia

La Rojita se impuso (2-0) a los griegos en el primer partido del preEuropeo. Aarón Caricol, de falta, y Borja Mayoral, de penalti, hicieron los goles. Brilló Ontiveros.

Actualizado a
Los goles de Aarón y Mayoral guían a España contra Grecia
SEFUTBOL

España Sub-19 ha vuelto a un partido oficial de la misma forma que se fue del último Europeo de la categoría: con victoria. Contra Grecia en Lepe, los de De la Fuente han dado un golpe de autoridad (2-0) y es primera de grupo igualada a puntos con Inglaterra, que venció (2-1) a Georgia. El último partido, el martes 29, entre ingleses y españoles, se intuye como una final a todo o nada, ya que sólo uno se clasifica para el Europeo en el grupo de cuatro. Pero para llegar a ese choque decisivo con garantías, antes se debe vencer a Grecia y Georgia. La Rojita ya dio el primer paso.

El partido contra Grecia era una trampa. Los griegos no suelen presentar selecciones de gran calidad técnica, pero son correosos y saben competir. En un preEuropeo donde el margen de error no existe, superar con solvencia un encuentro así carga la moral de cara al futuro.

España entró con autoridad en el partido. Sólo tres campeones en el pasado Europeo (Simón, Caricol y Mayoral) estaban en un once plagado de caras nuevas, pero la sensación de seguridad que da este equipo se mantiene aunque cambien los nombres. La Rojita sólo tardó 22 minutos en adelantarse en el marcador gracias a un tiro libre convertido por Aarón Martín, capitán de esta Selección. Poco después, en el 26', Ontiveros provocó un penalti y Borja Mayoral no perdonó desde los once metros. Ontiveros, extremo del Málaga, es una de las sorpresas agradables de la nueva generación. Con un carácter complicado, muchos temieron que se perdiera por el camino hace unos años. Sin embargo, enderezó el rumbo, trabajó duro y ahora brilla en la Sub-19 para demostrar en el campo que aquellas dudas son cosa del pasado. Su velocidad por la derecha fue una pesadilla para los griegos y el guante que tiene en su bota derecha un peligro constante en cada centro a balón parado.

Con el 2-0, el partido se presentó perfecto para el juego de España, que dominó y lo durmió. En esta faceta tuvo especial importancia la presencia de Aleñà. Un año menor que el resto (es de 1998), asumió galones en el mediocampo para distribuir, robar y llegar al área cuando tuvo ocasión. También la pareja de centrales (Alende y Amo) tuvo una actuación destacada para dejar la puerta a cero, conscientes de que el golaverage puede ser decisivo en una competición tan corta.

En la segunda mitad, Poveda (que había sustituido a Mayoral) pudo hacer el tercero, pero el marcador ya no se movió. Victoria vital para España, que ya piensa en el duelo del sábado contra Georgia.