El Celta incendia Mestalla y acorrala un poco más a Neville

Mstalla no aguantó más. El “Gary vete ya” se escuchó alto y claro. El Celta de Vigo encendió a la grada y ésta quemó al técnico inglés cual ninot de falla. El Valencia es una caricatura de equipo, no juega a nada que no se juegue en cualquier campo de regional, que solo va por arreones y que en la recta final de los partidos se pone en modo avión. El Celta hizo, a su manera, la del Athletic, Atlético y Levante. Los vigueses poco a poco fueron llevándose el partido a su terreno. Además contaron con el apoyo de Neville, que con 0-0 sacó del campo a los dos únicos futbolistas que estaban creándole algo de peligro a Sergio: Rodrigo y Alcácer. Y así, Guidetti y Hugo Mallo dieron la victoria a un Celta que se aprovecha de la jornada y que se consolida en zona de Europa League y a solo seis puntos de la Champions.

El Valencia es un equipo con tan poca alma que ni tan siquiera protesta cuando le anulan un gol legal, como era el que anotó Alcácer y que el asistente de Undiano dejó sin validez por entender que estaba en fuera de juego. Lo dicho, ni por esas se encienden. Y, así, sus partidos transcurren entre arrones de calidad, como con André Gomes, aunque más aún al compás del rival, sobre todo si en sus filas hay un Orellana. Cuando el chileno dirigía el tráfico, el Celta ronroneaba a Mat Ryan. Cierto es que los de Berizzo ocasiones hicieron las justas. Una de Guidetti que entre el palo y el australiano y un par de disparos lejanos. Lo que sí dieron los vigueses es más sensación de equipo que los de Neville. Por ello al descanso se llegó con división de opiniones en la grada: unos protestaban al árbitro, otros al juego de los suyos.

Tras la reanudación, el Valencia, aún con su fútbol rudimentario, tuvo sus minutos y en ellos sus oportunidades. Entre el 50' y el 65'. Fue por mera cuestión de empuje. Liderados por Alcácer, que es de los pocos que de verdad siente el hierro, los de Neville pudieron hasta en dos ocasiones adelantarse en el marcador. En ambas, por sendos disparos de Rodrigo en los que Sergio le ganó la partida.Pero la gasolina se agotó, Neville erró y el Celta olió la sangre y mordió. Incluso el triunfo vigués, sin tampoco hacer nada del otro mundo nada más que defender bien y saber hacer transiciones letales, pudo ser más contundente de no ser porque los palos (hasta en tres ocasiones) se aliaron con Mat Ryan. El Valencia se queda 14º. A seis del precipicio. Por ello no se irá hoy para ser ayudante de Hodgson con Inglaterra. Lo hará el jueves. Lo suyo es humor inglés. Si se piensa que en tres días se resuelve el desaguisado que tiene montado... apañado va el Valencia, un equipo que en las ocho jornadas que resta debe enfrentarse, entre otros, a Villarreal, Sevilla, Barcelona y Real Madrid.