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REAL MADRID

La plaga de lesiones blancas pone el foco en el doctor Olmo

Ancelotti acabó enfrentado con él; la plantilla dice que es el confidente de Florentino. Puso el departamento médico patas arriba. Hoy las lesiones musculares se han duplicado.

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La plaga de lesiones blancas pone el foco en el doctor Olmo
AStv

La de Carvajal (cuádriceps) es la decimosexta lesión muscular del Madrid en cuatro meses y medio de temporada. Desde el club se esfuerzan en buscar una explicación. Más aún cuando Florentino Pérez encontró el argumento principal para el despido de Ancelotti la pasada temporada en la mala preparación física de la plantilla (aunque estuviera a punto de meterse en la final de Berlín y luchara por la Liga hasta la última recta) y en las muchas lesiones que tenía (ocho con él a estas alturas por las 16 de Benítez).

Dentro del vestuario afirman que el preparador físico de Benítez, Paco de Miguel, no ha aumentado mucho la carga de trabajo con respecto a la pasada temporada (“jugando dos días por semana poco más se puede hacer”, dicen a AS). Ni siquiera hay acumulación de minutos en los futbolistas, que han rotado forzados por las propias lesiones. Sólo Cristiano lo ha jugado todo (1.620 minutos). El césped de Valdebebas es el mismo, nada ha cambiado en la alimentación de los futbolistas...

La pandemia de lesiones pone el foco sobre todo en el doctor Jesús Olmo, jefe de los servicios médicos al que Florentino dio plenos poderes este verano y con el que Ancelotti tuvo un duro enfrentamiento la pasada temporada porque no compartía sus métodos ni entendía sus injerencias en la preparación física y prevención de lesiones y su recuperación. Los jugadores tampoco confían en él. Le señalaron como el topo en el vestuario de la directiva. Incluso los capitanes se reunieron con José Ángel Sánchez (a mediados de la pasada campaña) para pedir que se fuera.

Pero obviando este problema, Florentino encargó a Jesús Olmo (persona muy cercana a Jerónimo Farré, cardiólogo del presidente y miembro de su junta directiva) que reorganizara el departamento médico este verano. Y lo puso patas arriba. Despidió a profesionales que llevaban más de una década trabajando para el Madrid, como el traumatólogo Paco Morate, los fisios Pedro Chueca (principal fuente de conflicto por la confianza que en él tienen los jugadores, al que siguen visitando), Juan Muro, Carlos Heredia o Dani Pirri (hijo de Pirri) y el recuperador Santi Lozano. El doctor Olmo eligió a dedo a su equipo (ver el organigrama) con fisios de su confianza pero de poca experiencia en la élite, fichó al traumatólogo Mikel Aramberri (para que estuviera más con el primer equipo porque a él los jugadores no le quieren dentro del vestuario) y trajo de vuelta al fisiólogo Ximo Mas. Una denuncia del Colegio Profesional de Fisioterapeutas de Madrid impidió que Jesús Olmo contratara a Vitor Pimenta, un masajista portugués sin título de fisioterapeuta.

Con los cambios, ni hay menos lesiones (al contrario, hay el doble) ni los plazos de recuperación se han acortado: James estuvo 53 días de baja; Pepe se fue de los 21 días a los 36; Benzema tardó 43 en volver de su última lesión cuando se pronosticaron de dos a tres semanas... Y hay jugadores que se retiran con molestias, como Marcelo ante el PSG el 4 de noviembre, para luego caer lesionados en la misma zona como le ocurrió en el Clásico del día 21 tras haber estado parado tres semanas.