Uno a uno: destellos de Óliver, Saúl no convence como 'cinco'
El primero asistió a Vietto; el segundo mezcló acciones buenas, como el 1-2, con errores. Vietto salvó su actuación con el gol del empate.
Moyá: regresó a la titularidad por la Copa 30 partidos oficiales después. Apenas le llegaron una vez en la primera parte y fue gol, aunque poco pudo hacer ante Fran. En la segunda parte sólo le inquietaron con disparos lejanos.
Gámez: menos profundo que Siqueira, como es costumbre. Guardó el sitio y no se incorporó demasiado en ataque, cediendo el protagonismo en esa banda a Óliver.
Savic: el más entonado de los dos centrales, aunque Colorado, Fran y Fernando le dieron trabajo. Salió bien de los envites a que se enfrentó.
Lucas: tremendo error de bulto en el 1-0 del Reus. No acertó a despejar el balón y Fran se quedó solo ante Moyá. Le marcó en el partido, los atacantes locales ya sólo le buscaron a él.
Siqueira: mucho más atrevido que Gámez en ataque, aunque sin mucho acierto y dejando espacios atrás que el Reus buscó, sobre todo con las internadas de Haro, que le hizo sufrir con su habilidad.
Saúl: en el primer partido post-Tiago, ejerció de ‘5’ y combinó buenas acciones con fallos en la salida del balón que en ese puesto pueden costar caros. Hizo con un gran cabezazo el 1-2 y luego se desenvolvió de interior, con menos responsabilidad en la salida del cuero.
Thomas: como interior derecho, como ya avisó Simeone, destaca por su circulación en carrera, rompiendo líneas con su zancada. Pero arriesga a veces en exceso. Eso sí, cuando acelera es un bisonte, y lo probó en más de una ocasión.
Koke: el único titular del once inicial bregó en la medular, pero no tuvo mucho acierto en la primera parte, ni siquiera en las acciones de balón parado, su especialidad. En la segunda asistió a Saúl en el 1-2 con un buen lanzamiento de córner y luego se ubicó como eje en la línea medular.
Óliver: escorado a la derecha pierde su esencia de pasador a límite, razón por la que se fue al centro siempre que pudo. Aunque fue desde la banda donde asistió a Vietto para el 1-1. Mediada la segunda parte se ubicó en la mediapunta para lanzar las contras. Incisivo.
Vietto: su partido hasta el gol era muy malo. Marró la primera, un mano a mano ante Badía, y no se enteró de demasiado. Cuando cabeceó a la red el 1-1, en posición dudosa, se entonó y entró mucho más en juego. En la segunda parte tuvo a Correa como compañero de delantera, pero no entró mucho en juego.
Correa: hay chispazos en los que se atisba el jugador que puede ser. Es eléctrico, pero muy disperso. Probó a Badía con un disparo entrando por la izquierda como único hecho reseñable en la primera parte. En la segunda actuó de delantero, pero el cambio no le imprimió más peso en el partido. De hecho, se equivocó en jugadas con espacio para sentenciar.