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GRUPO D | MOENCHENGLADBACH - SEVILLA

Algo o nada en Gladbach

El Sevilla, a ganar y mirar a Turín para seguir vivo (20:45, beIN Sports). La victoria aseguraría al equipo de Emery el mal menor, la Europa League.

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Algo o nada en Gladbach

Borussia MGladbach - Sevilla en directo aquí

El Gladbach recomendó al Sevilla entrenar en el campo anexo al Borussia Park porque el césped, debido a las lluvias, está muy blando. Emery quiso entrenar en el lugar del partido.
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El Gladbach recomendó al Sevilla entrenar en el campo anexo al Borussia Park porque el césped, debido a las lluvias, está muy blando. Emery quiso entrenar en el lugar del partido.Morenatti

En medio de un ruido institucional cada vez más insoportable (José Castro no descartó ayer prescindir de Del Nido jr. en la próxima junta de accionistas), el Sevilla juega esta noche al filo de la navaja en Moenchengladbach donde sólo podría obtener una alegría de mínimos. Para seguir vivo en la Champions, a la que sudó seis años para regresar, necesita ganar y que la Juve pinche ante el City. La victoria, sin embargo, sí le aseguraría el mal menor, la Europa League. La copa que cambió su vida.

La visita es peliaguda. Desde que André Schubert tomó la dirección del Gladbach a finales de septiembre tras la dimisión de Lucien Favre, el equipo, que era sorprendente colista de la Bundesliga, ha ganado ocho partidos, ha empatado tres y sólo ha perdido contra el City y en el descuento. A Schubert, que fue firmado como interino, el Borussia ha ido corriendo a asegurarle el puesto hasta 2017. Juega un 4-4-2 dinámico porque se lo permiten futbolistas de buen toque como Xhaka, amenazas en las bandas (Traoré y Johnson) y un goleador iluminado estos días, Raffael.

Emery ha intentado llenar a su grupo de autoestima y pretende repetir el once que deslumbró sin éxito en Manchester, con Tremoulinas-Banega-Konoplyanka como triángulo de inicio de las operaciones en ataque por el sector izquierdo, Vitolo liberado y Gameiro de vuelta en la delantera. Llorente, fichaje de relumbrón de verano, no encuentra su sitio. Y no le adivina.

El Sevilla asombró el año pasado en Gladbach, donde con un despliegue físico y de fútbol hermoso (y un gran Vitolo) terminó de poner los cimientos de ese equipo inabordable que acabó la ruta con un título en Varsovia. Este año, Sevilla es otro. Un día apunta, alguno titubea, y otro revienta o tumba a un grande. Hoy sólo tiene un camino. Ganar y esperar favores desde el Piamonte.

Se esperan cuatro grados a la hora del partido

Con frío y aguanieve recibió el aeropuerto de Dusseldorf al Sevilla, desde donde se trasladó en un viaje de menos de media hora en autobús a la cercana localidad de Moenchengladbach. Al menos, esta noche a la hora del partido el parte meteorológico no da riesgo de lluvia, aunque el mercurio del termómetro marcara unos escasos cuatro grados durante el encuentro. La venta de entradas continúa a buen ritmo y se espera una entrada similar a la de la temporada pasada en la Europa League, cuando más de 40.000 espectadores poblaron las gradas del Borussia Park creyendo en una remontada de Los Potros que finalmente no llegó a producirse.