El club presentará pérdidas y la deuda a un año de 97 millones
Ya se conoce la memoria del Consejo: 365.000 euros de pérdidas en el último ejercicio y la deuda neta sigue en 133 millones. Se confirma la urgencia de una inversión extranjera.
La Associación de Pequeños y Medianos Accionistas del Espanyol (APMAE) ya tiene en su poder, como el resto de accionistas de la entidad que así lo deseen, las cuentas que presentará el club blanquiazul en la Junta de Accionistas del día 22 de diciembre. Grosso modo, y a falta de profundizar en la microeconomía, si que se conocen los principales datos del último ejercicio, que comprende el periodo de julio de 2014 a junio de 2015.
Los números no son muy esperanzadores y refuerzan la idea de que la inversión de Rastar Group es más que necesaria para la viabilidad del club. El ejercicio se saldó con pérdidas por segundo año consecutivo. Si en diciembre de 2014 la entidad presentó un balance negativo de 111.306 euros, el que hará público el día 22 será del triple (365.000 euros). Hay que recordar que la mayoría de las ventas de la entidad este verano no se contemplan en este ejercicio, pues se fructificaron a partir de julio (Kiko Casilla, Lucas Vázquez, Héctor Moreno y Cristhian Stuani), de ahí que haya en la memoria un aumento del activo de 10 millones de euros que pueden provenir de estas partidas futuras.
La deuda neta desciende poco menos de un millón de euros. Pasa de 134.328.000 euros a 133 millones, una buena noticia aunque insuficiente porque la entidad sigue inmersa en su complicado círculo económico, un callejón que sigue mostrándose sin salida. De hecho, la deuda bruta aumenta hasta los 191 millones y la deuda a un año asciende a 97, lo que requiere que el órgano director de la entidad tenga que negociar arduamente para convertirla en deuda a largo plazo.
A falta de profundizar y exponer los ingresos (en el ejercicio 13-14 disminuyeron alrededor de cinco millones), la economía perica sigue estancada y la deuda cada vez es más asfixiante. Por eso mismo, la primera misión de Chen Yansheng será la de solventar este asunto urgente y regenerar una entidad que, en cuestión de números, sigue sin poder reaccionar.