NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

MÁLAGA

Sergi Darder: "Pedí vía Twitter al jeque que me dejara irme"

"Es la única manera de hablar con él", asegura. Darder ha remitido un comunicado de despedida: "Pido perdón a la afición, no estuve a la altura".

Actualizado a
Sergi Darder, con la camiseta del Lyon
JEFF PACHOUDAFP

Sergi Darder, a través de las redes sociales, ha remitido un comunicado de despedida, desde Lyon, para la afición del Málaga que por su interés reproducimos en su integridad. No tiene desperdicio. "Pido perdón a la afición porque no estuve a la altura" afirma.

"Lo prometido es deuda. Anuncié cuando se consumó mi traspaso al Olympique de Lyon que hablaría y a ello procedo. He apurado al máximo para expresarme en persona en Málaga pero, lamentablemente, los compromisos con mi nuevo club me hacen inviable viajar allí en fechas próximas y, ante mi necesidad y deseo de dirigirme al malaguismo, lo hago a través de este comunicado. Cierto es que era conocedor desde hace unas semanas de que no viajaría a Málaga por incompatibilidad de fechas, pero la situación deportiva del equipo no era buena y no quería interferir negativamente con mis palabras. De ahí que haya elegido este parón en la competición para dirigir estas palabras. En primer lugar, quiero pedir perdón a la afición del Málaga. Entiendo el malestar que mi salida ha generado entre la hinchada. Yo sí pido perdón. En mi afán no estaba ofender a nadie ni generar todo lo ocurrido durante el proceso de mi venta. Guardé silencio y me mantuve al margen, por mucho que otros se empeñasen en filtrar aquello que creían oportuno faltando a la realidad. No estoy orgulloso de cómo se produjo mi marcha de Málaga y cada aficionado, por supuesto, tiene el derecho a opinar sobre ella. Opté por el silencio y me equivoqué. No voy atacar a nadie por su gestión, ni a defender a nadie por sus actuaciones. Los implicados en mi salida saben bien lo que ocurrió. Yo hablo por mí y reconozco que no estuve a la altura de la afición de este club. Del acuerdo, sus formas y sus cantidades es el Málaga quien tiene que dar cuenta. Yo no controlé los tiempos del traspaso, ni conocía la venta de mis derechos a un inversor. Yo exigí que me dejaran salir porque me sentía utilizado. Llevaba dos años en el mercado por expreso deseo del club. Ahora te vendo, ahora no te vendo. Ahora tráeme una oferta, esta oferta me gusta, la que antes me gustaba ahora no, prepara la maleta que te vas y después no. Sácate los billetes que sales mañana, ahora no; esta tarde tienes que ir al aeropuerto, hemos decidido finalmente que no... Y así un largo etcétera. Llegó un momento en el que entendí que esta inestabilidad no era lo mejor para mí y, desde ese instante, le exprese mi deseo al club de irme, inclusive le pedí al señor Al-Thani que me lo permitiera, a través de un mensaje personal por la única vía accesible para hablar con él, por Twitter. Lamentablemente, sin respuesta por su parte. Es muy posible que mis formas no estuvieran a la altura, cierto. Pagué la novatada y lo reconozco, por eso pido perdón. Insisto, no estuve a la altura de la afición. Tras mi fichaje yo no controlé cuándo se firmaban los documentos en Barcelona, ni cuándo me iban a presentar. Entiendo el enfado del malaguismo por la coincidencia del anuncio del traspaso con el partido de mis compañeros en el Camp Nou. Asumo mi culpa, pero todos saben que esto en concreto no dependía directamente de mí. Pese a todo lo sucedido tengo perfectamente claro a quién tengo que estar agradecido, por darme la oportunidad de alcanzar la Primera División, por cuidarme y por lanzar mi carrera. Me fui entendiendo que era lo mejor para mí en ese momento. Lógicamente, sin rencor a nada ni nadie. Puedo estar equivocado, es posible. Espero que no. Pero insisto en que lo poco que soy es gracias al Málaga CF y a su afición. Agradezco su confianza a Schuster y Javi Gracia, con sus correspondientes cuerpos técnicos al completo, y a Manel Casanova. A mis compañeros, a los empleados del club y, sobre todo, a la afición, que hasta el último momento supo comportarse conmigo de manera ejemplar. Para ellos va mi último mensaje: siento si os fallé, os garantizo que en mi corazón tendré esta ciudad, este club y esta afición. Ustedes nunca me fallaron, mucha suerte a todos y ¡Viva el Málaga!".