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LEGANÉS

La falta de prestigio frena los fichajes del Leganés

El club ha elevado el nivel de exigencia y busca jugadores de peso. Aunque sus ofertas son jugosas, los futuribles fichajes prefieren equipos de renombre.

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El Leganés sigue confeccionando su plantilla y lo hace, por ahora, a un ritmo menor del esperado. Asier Garitano ha elevado las exigencias del club de cara al nuevo proyecto para la temporada que está a punto de comenzar, un proyecto con el que desea aspirar al play-off de ascenso a Primera. Eso implica que los fichajes que pretenden los blanquiazules sean, en su mayoría, futbolistas de renombre en la categoría e incluso de un estatus superior. La gran parte de estas operaciones, sin embargo, han dado por ahora un resultado negativo. Y no por cuestiones económicas, sino por una cuestión de ‘marca’. Al Leganés le falta prestigio en el fútbol profesional y sus futuribles incorporaciones prefieren equipos de mayor renombre.

Chuli es el mejor ejemplo. El delantero bético ha elegido el Almería antes que continuar en Butarque pese a que la oferta de los madrileños era muy superior. Ni siquiera su buen papel durante los seis meses que duró su cesión al Lega le ha hecho cambiar de opinión.

Algo parecido ha sucedido con Marc Bertrán o Pape Diamanka. Ambos recibieron sendas propuestas de renovación semanas antes de que terminara el campeonato. Las cuantías de estas tentativas eran interesantes, e incluso el club estaba dispuesto a mejorarlas si fuera necesario para evitar su marcha. Los dos se decantaron finalmente por el prestigio y proyecto deportivo del Zaragoza.

Como estos casos hay muchos otros, afirman fuentes cercanas a la entidad blanquiazul. Es por ello que el club no descarta que sus fichajes de peso se retrasen mucho más de lo deseado. En concreto, hasta que los grandes equipos de la categoría (muy activos en este inicio del mercado estival) finalicen el grueso de sus operaciones. Tampoco sería descabellado, informan desde el Leganés, que se ofreciera regresar a algunos jugadores a los que ya dio el finiquito e incluso que el equipo comience el curso con un buen número de fichas libres (cinco o seis).

Y es que la dirección deportiva tiene claro que no piensa bajar el listón de exigencia para sus caras nuevas. Dicho de otro modo, los fichajes deberán igualar o mejorar lo que ya hay en la plantilla. No se fichará por fichar. No se fichará por rellenar plantilla.