NÁPOLES 2 - LAZIO 4
Higuaín lanza un penalti al cielo y el Nápoles, sin Champions
El Lazio ganó en San Paolo y se llevó la plaza en juego. Parolo y Candreva pusieron el 0-2, Higuaín empató con un doblete y Onazi y Klose decidieron.
De héroe a villano en seis minutos. Higuaín en estado puro. Abanderó la heróica del Nápoles en una remontada que llegaba con música de Champions, pero en el fatídico 70’ lanzó el penalti de la gloria al cielo de Nápoles.
El San Paolo enmudeció, Benítez se echó las manos a la cabeza y se acabó el sueño azzurri. El castigo tuvo su prolongación cuando en el 85’ Onazi sacó petróleo del enésimo error defensivo napolitano y no digamos ya en el 89’, con remate de cabeza a la red de Klose. Como si tuvieran un resorte en el asiento, los tifosi enfilaron el camino de la calle, dejando la despedida de Benítez en un tristísimo funeral.
Acabó mal lo que empezó mal. El Nápoles encaró el partido encogido, fallón hasta irritar incluso en un mano a mano de Callejón que cruzó demasiado y pudo cambiar el partido. Parecía un milagro que este once peleara por entrar en Champions. No pudo suceder otra cosa que el castigo de dos goles en fallos clamorosos de Andújar y Koulibaly.
Benítez se empleó en el descanso y el Nápoles retornó inyectado en sangre. Quizo balón, quiso arriesgar y encontró el empate diez minutos de locura, con un Lazio que se quedó con diez. Después, el destino sería amargo. Un mal penalti y el decorado se vino abajo.