Ayestarán podría dejar el Maccabi incluso logrando el triplete

El fútbol israelí tiene un nombre propio por encima de todos esta temporada: Pako Ayestarán. El entrenador español, ayudante en su día de Benítez y Emery, ha triunfado en el Maccabi Tel Aviv en su segunda aventura como primer entrenador, después de la que tuvo el curso pasado en el conjunto de segunda división mexicana Estudiantes de Tecos. En un banquillo en el que anteriormente ya lo había hecho muy bien otro técnico español, Oscar García Junyent, el beasaindarra conquistó la Copa de la Liga, primero, y la Liga, este fin de semana, en una colección de títulos que puede completar este miércoles si también se hace con la Copa. El Hapoel Beer Sheva será el último escollo en su camino hacia el triplete.

El futuro de Ayestarán en Israel, pese a ello, no está claro. En estos momentos ni la conquista de los tres grandes títulos en el fútbol israelí puede asegurar su continuidad. El motivo es que la relación entre él y el director deportivo del club, Jordi Cruyff, no es la mejor y la única solución para acabar con ello sería una salida. El hijo de Johan, exjugador del Barcelona y exinternacional holandés, dirige los designios en los despachos del Maccabi desde que en 2012 fuera nombrado mánager general y tiene mucho poder dentro de la entidad.

En los últimos días se ha publicado que llegó a entrar en el vestuario para decir a los futbolistas que Ayestarán continuará en el cargo, pero lo cierto es que la decisión no sólo le corresponde a él y la última palabra puede ser la del entrenador. Ahora mismo el objetivo es cerrar el curso con un triplete que reconozca el excelente trabajo de Ayestarán y su cuerpo técnico. Después ya se verá, pero ni siquiera un éxito como ese puede asegurar que el año que viene el Maccabi tenga a su actual entrenador en el banquillo.