Sergi entra en combustión un día antes de jugar ante el Sevilla

Sergi Barjuan ha sido el entrenador número 17 del presidente del Almería, Alfonso García, quien siempre echó de menos a Emery. Sin querer, Unai puede poner esta tarde a su club trampolín al filo del segundo descenso en cinco temporadas. Pero la noticia, por un día, no es Emery. Sergi llegó ayer como un avión a la sala de prensa: “Es el día más triste desde que soy entrenador del Almería (lleva un mes y diez días). Viendo el entrenamiento, nos vendremos con un saco. Falta de actitud, falta de compromiso, falta de entender qué nos jugamos. Tenía pensado un once y tendré que cambiarlo”. A degüello.

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Con un colchón de seguridad de sólo un punto (siempre contando con los tres que están pendientes de la resolución del TAS), nadie esperaba semejante movimiento sísmico en el Almería a dos jornadas del final de Liga. Tal vez Sergi no haya querido más que poner en tensión a sus jugadores antes de presentarse en un escenario que está de fiesta. O tal vez es que lo ve muy negro. Simplemente. El Sevilla no se engaña y es más que probable que hoy termine la jornada sin opciones de aspirar al cuarto puesto en la última jornada. Pero ha decidido pelear hasta el final. La plantilla y Emery saben que hay premio extra. Si hoy gana, el Sevilla superará la mejor puntuación de la historia.

Hay jolgorio en Nervión, de resaca aún de Florencia y pendiente de los vuelos a Varsovia. Emery quiere tener a todos de puntillas hasta el final, volverá a rotar. Momento para Iborra, Reyes, Denis, Gameiro y tal vez Aspas. En el Almería, Sergi espera la aplicación defensiva que no hubo en el partido ante el Málaga y que Thievy o Wellington espabilen.

Las Peñas: “En defensa del sevillismo”

Algunas peñas sevillistas promueven en la previa del encuentro de esta tarde una concentración en la explanada del Gol Norte “en defensa del sevillismo”, por lo que consideran una criminalización de la afición nervionense por parte de la LFP.