“Volveremos a por ella”

Después de casi un año en las vitrinas del Bernabéu, la Copa de Europa volvió ayer a territorio neutral. En un acto simbólico celebrado en el ayuntamiento de Berlín, ciudad que albergará la final de la Champions por primera vez en la historia, una delegación del Real Madrid formada por Paco Gento, Amancio Amaro y Emilio Butragueño entregó la Décima a Michael Müller, alcalde de la capital germana. “Cuidadla bien que el 6 de junio volveremos a por ella“, dijeron los veteranos. También asistieron el exjugador del Borussia Karl-Heinz Riedle, embajador de la final de Berlín, y Wolfgang Niersbach, presidente de la federación alemana de fútbol que sustituyó a Michel Platini, presidente de la UEFA, que no pudo asistir debido al fallecimiento de un familiar.

El trofeo descansará en Berlín hasta que el próximo 6 de junio vuelva a ser levantada por Madrid, Barcelona, Bayern o Juventus. “Es un gran honor y una gran responsabilidad albergar esta final”, comentó Niersbach. Más que eso, será un grandísimo reto. Berlín tiene la fama de ser la ciudad más caótica de Alemania y la Champions no será el único evento que se celebre en la ciudad. El 30 de mayo, justo una semana antes de la final que dirima al campeón de Europa, se disputará la final de la Copa de Alemania en el Olímpico de Berlín. En apenas siete días, la casa del Hertha, que fue inaugurada en el año 1936 durante la epoca nazi en Alemania, tendrá que cambiar su color del verde copero, al típico azul marino de la Champions.

Mientras ultiman la organización de ambos eventos, la ‘Orejona’ será paseado por toda Berlín de manos de hijos famosos de la ciudad como la tenista Sabine Lisicki o el ex jugador del Hertha y de la Mannschaft Arne Friedrich. Los berliners tienen preparado un itinerario y exhibirán la Copa de Europa en barco, bicicleta, metro, tranvía e incluso en Trabi, el coche típico de la extinta República Demócrata Alemana.

Favorito. Eso sí, los teutones prefieren que la Champions no tenga que hacer demasiados kilómetros después de una final para la que ya no hay entradas. “Yo no tengo por qué ser del todo neutral. Cruzo los dedos por el Bayern”, reconoció el alcalde Müller. Niersbach añadió: “No podría imaginarme mejor final en Berlín que un Madrid-Bayern”. Sin embargo, las casas de apuestas en España dan como favorito al Barcelona. El triunfo azulgrana se paga de media a 2,90 euros por cada uno apostado, mientras que por la Undécima se pagaría a 3,06, por el Bayern a 3,27 y por la Juventus a 8,80. El Madrid tiene la historia de su parte: en 1986, alzaron su última Copa de la UEFA frente al Colonia en el Olímpico berlinés...