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REAL MADRID - ATLÉTICO DE MADRID

Benzema está descartado; Mario Mandzukic sí podrá jugar

Chicharito pasa de marginado a gran esperanza blanca. Ancelotti tampoco podrá contar con Marcelo, Modric y Bale. Simeone medita un 4-3-3 con el croata, Griezmann y Arda.

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Benzema está descartado; Mario Mandzukic sí podrá jugar
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Hace siete días, en las horas previas al primer derbi de cuartos de final de Champions, el Madrid se presentaba pleno de moral y efectivos. El debate con que entreteníamos la espera era Bale o Isco, prueba fehaciente de que no cabían todos. Con el regreso de Modric (10 de marzo), el equipo de Ancelotti había corregido el rumbo. Con la incorporación de James (5 de abril), el Madrid había recuperado el pulso de sus mejores partidos.

Queda lejos la semana pasada. El Madrid afrontará mañana el derbi de vuelta sin Modric (seis semanas de baja), sin Bale (tres) y sin Benzema. El francés, todavía renqueante de un esguince en la rodilla derecha, está descartado por el entrenador. Tampoco jugará Marcelo, por acumulación de tarjetas. Cuatro titulares fuera de combate.

La última vez que el Madrid se enfrentó con tantas bajas al Atlético fue en Liga, en una tarde de infausto recuerdo para el madridismo (4-0), hace algo más de dos meses. Entonces faltaron Pepe, Sergio Ramos, Marcelo, Modric y James. La presencia de la BBC no alivió el desastre.

Asombro. El Atlético asiste a los problemas de su vecino con sentimientos encontrados, entre la satisfacción y el desconcierto. Se valora la ausencia de Modric, pero el equipo (y la afición) se encuentra más a gusto cuando el Madrid es favorito. Se teme que un cambio de papeles implique también un cambio de guión, y no olvidemos que el Atleti salió invicto de los últimos siete derbis.

Las inquietudes propias apenas se mencionan, aunque existen: Mandzukic (lesión en un tobillo) no se entrenó ayer con el grupo, aunque parece seguro que saldrá de inicio. La sorpresa que se guarda Simeone podría ser un 4-3-3, con el croata, Griezmann y Arda en la línea de ataque, seguidos de Koke, Tiago y Saúl. El objetivo sería ensanchar el terreno de juego y, al mismo tiempo, abrir las costuras del mediocampo rival, más inclinado hacia los espacios interiores.

En el Madrid, las lesiones de los delanteros conceden a Chicharito una importancia que nadie hubiera imaginado hace una semana, ni él mismo. El pasado 30 de marzo fue contundente ante los micrófonos de la Fox: “Mi situación es frustrante. Colaboro, ayudo y doy el cien por cien, pero en los partidos las oportunidades son mínimas”. En cuestión de días ha pasado de delantero marginado (seis partidos como titular en todas las competiciones) a gran esperanza blanca. Está fresco (848 minutos), ha sido titular en los dos últimos encuentros (gol y asistencia) y se asocia bien con Cristiano.

La única duda de Ancelotti es el sustituto de Modric. Illarramendi, Khedira y Lucas Silva son las opciones. Quien apoye las posibilidades de Illarra, presente en los dos últimos partidos, debe recordar que Khedira jugó la final de Champions recién recuperado de una rotura de ligamentos. Quien apueste por Lucas Silva conoce algo que no sabemos. Lo que es seguro es que no habrá experimentos, como aquel que situó a Ramos de centrocampista en un Clásico de la pasada temporada.

Ya lo ven, el derbi está servido; sólo queda (y es metáfora) hincarle el diente.