REAL ZARAGOZA
La Romareda, campo abierto
El Real Zaragoza está enterrando en su estadio, donde ya encadena cuatro partidos sin ganar, sus aspiraciones de promoción de ascenso.
Al margen de haber conseguido únicamente nueve puntos de los últimos 27, el Real Zaragoza está enterrando sus aspiraciones de playoff de ascenso en La Romareda. El equipo aragonés ya acumula cuatro partidos seguidos sin ganar en su estadio, lo cual es un handicap bastante importante de cara a sus aspiraciones. Cuatro empates que le han hecho mucho daño y que dieron origen a los pitos que sufrieron los jugadores y el entrenador a la finalización del partido contra el Sporting el pasado sábado.
Hasta esta mala racha en casa, el Real Zaragoza sólo había dejado escapar doce puntos de La Romareda en trece encuentros disputados, con un balance de ocho victorias, tres empates y dos derrotas. Desde el pasado 1 de marzo, cuando empató a dos contra el Llagostera, el equipo aragonés ha dejado escapar ocho puntos, logrando cuatro empates consecutivos, un balance muy pobre para un equipo que aspira a estar entre los seis primeros clasificados.
Tras el empate contra el Llagostera, con dos goles de Borja Bastón, que desde entonces no ha vuelto a marcar en La Romareda, el Real Zaragoza cosechó un nuevo empate contra el Lugo, en esta ocasión sin goles. Dos semanas más tarde volvió a haber tablas contra el Alcorcón, que igualó el tanto inicial de Willian José en una muy mala segunda parte de los pupilos de Popovic. Y por último, los aragoneses tampoco supieron aguantar la ventaja el sábado pasado contra el Sporting, que jugó la última media hora con un hombre menos y que antes pudo haberse llevado los tres puntos si el árbitro hubiera señalado un claro penalti de Fernández por mano.
De esta forma, el Real Zaragoza está a un encuentro de igualar su peor racha sin ganar en La Romareda en Segunda División, una mala racha que data de la temporada pasada, cuando el equipo aragonés estuvo cinco partidos sin ganar en su estadio. Fue al comienzo de la segunda vuelta, con un balance de tres derrotas y dos empates. Empezó con un 0-0 contra el Hércules, después cayó derrotado contra los filiales del Barcelona y el Real Madrid por 0-2, una jornada después empató a uno contra el Mallorca y finalmente perdió contra el Deportivo por 0-1. En aquella ocasión, el Zaragoza puso fin a esta mala racha ganando por 1-0 al Éibar, que llegaba a La Romareda como líder de la categoría.
Ahora, los aragoneses tienen la oportunidad de cortar esta mala dinámica en casa dentro de dos semanas contra el Numancia y de esta forma engancharse de nuevo al objetivo del playoff de ascenso.