NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ALMERÍA 0 - VILLARREAL 0

Un Almería sin gol no puede con los suplentes del Villarreal

Ambos equipos acabaron con diez jugadores por expulsiones de Mauro dos Santos, por doja directa y de Jaume Costa, por doble amonestación.

AlmeríaActualizado a
Un Almería sin gol no puede con los suplentes del Villarreal

Sexta jornada consecutiva sin ganar y cuarta sin marcar del Almería. Con estos datos, no hará falta ni que se haga efectiva la sanción de la FIFA de tres puntos para que los rojiblancos den con sus huesos en el pozo. El Villarreal se lamió las heridas de su derrota europea con un punto que no sabe ni bien ni mal, sino todo lo contrario. Marcelino hizo siete cambios respecto al once que perdió contra el Sevilla y la mayoría de ellos le dieron la razón para ocupar el banquillo en la mayoría de los partidos que restan hasta final de temporada.

El problema del Almería es de gol, lo cual es muy grave. Julián sigue rindiendo bajo palos, Trujillo apaga los fuegos que generan el resto de defensas (demencial la autoexpulsión de Mauro en el 39') y Wellington genera mucho fútbol por banda. El problema es que ni Thievy ni, sobre todo, Hemed, marcan un gol al arco iris. Lo del israelí en el 62' con el balón botando en el área pequeña y sin oposición para marcar pasará a la historia de las jugadas ridículas. La mandó a las nubes.

El Villarreal no estuvo durante más de una hora. Giovani o Campbell son de esos nombres que suelen aparecer en los resúmenes pero que cuando no les da la gana jugar, como en el Mediterráneo, restan. La cara de los de Marcelino, que jugaron la última media hora con diez por expulsión de Jaume Costa, cambió con las entradas de Cheryshev y Vietto, que sí justificaron su titularidad indiscutible. Tras fallar el Almería ocasiones de todos los colores, un buen pase de la muerte de Cheryshev no fue rematado a puerta por Pina, ya que Dubarbier logró estorbarle lo justo.

Las de Pina y Hemed fueron las ocasiones más claras de un partido de ida y vuelta, con llegadas pero sin que ninguna acabara de culminar. Julián y Asenjo trabajaron pero sin alardes. Ninguno de los equipos se atrevió a soltarse y el partido murió en una guerra de guerrillas, en la que los que llegaron con algo de fuerza al tramo final, Weillington y Cheryshev sobre todo, lo intentaron por su cuenta sin éxito.

Los síntomas del Almería son preocupantes. Es un equipo que por lo general juega mejor que el rival pero que no gana y eso es definitivo. El Villarreal, por su parte, aún intenta procesar el varapalo europeo. No era una mañana para alardes y el punto no le sabe mal a Marcelino, mientras que JIM aún debe darle vuelta a como Hemed falló todo lo que falló.