El Sevilla con un gran Iborra y la Real Sociedad contra la hora

El Sevilla se dio un subidón de autoestima el jueves ante el robusto Moenchengladbach. Emery celebró desbocado el gol de Iborra, que le fortaleció en su plan táctico (prescindió de Reyes, el preferido a día de hoy de la grada, para dar entrada a Diogo) y coronó a Iborra, cuya posición también ha sido muy cuestionada en los últimos partidos. Iborra, después de fallar con la espada en el Bernabéu (donde ya jugó un buen partido) ha marcado dos goles ante Córdoba y Borussia y Radio Sevilla anunció el viernes que Vicente del Bosque lo tiene apuntado en rojo en su agenda. Está en la órbita de la Roja, todo un mérito. Será por eso, porque suele mejorar el rendimiento de sus futbolistas y es ecuánime, el vestuario está con Emery, primer entrenador que visita Anoeta (su casa, por cierto) desde que Moyes se mostró triste porque nadie quiere echar una copa de vino con él después de los partidos.

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Apuros. Antes de que se tomen algo, sin embargo, el escocés no va a estar para bromas. Necesita puntos para sobrevivir mientras le dura la baja de Vela y, de momento, se ha agarrado a Aguirretxe, que ha hecho gol en los últimos dos partidos. Por lo que se ve, el partido de las doce se le da mal a la Real, que desde que el horario se incorporó a la parrilla de Primera, no ha ganado un solo partido de siete. Tal vez para animarse, lo último ha sido una campaña publicitaria, Jalea a la Real, que juega con el nombre del patrocinador y el nombre del alimento reconstituyente. Algo así como un mensaje subliminal.

Las coordenadas del partido parecen sencillas. A la Real le gusta el balón. Que lo jueguen Pardo, Canales (con molestias) o el Chory, que por extrañas circunstancias juega menos de lo que dice su fútbol. El Sevilla preferirá esperar y correr con Aleix, Deulofeu y Gameiro para a ver cuántas rotaciones se permite Emery. Es inevitable tener un ojo en el partido de Alemania porque ser el campeón exige, pero el Sevilla no quiere perder el tren de la Champions y el ritmo está altísimo. Eso sí, desde que terminó su partido europeo habrán pasado sólo dos días y medio. Demasiado poco como para no suponer un pequeño descenso de rendimiento. Apunta a buen partido.

Regreso de Unai Emery a su casa con enfado por el horario

Unai Emery regresa hoy a San Sebastián para enfrentarse a su Real Sociedad, club en el que se crió y para el que tuvo un recuerdo en la rueda de prensa previa al partido. “En la Real me hice futbolista y persona, gracias a esos diez años de los 14 a los 24 que han dejado mucha parte de lo que soy. Allí está mi familia, mis amigos y gente que me ayudó mucho. Sigo la trayectoria de un equipo que está trabajando muy bien desde el ascenso”. Sin embargo, el feliz regreso a su tierra se ve algo empañado por su protesta por el horario del partido.