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GRANADA

Caparrós completa el peor inicio desde la vuelta a Primera

Tanto Fabri como Lucas Alcaraz mejoran sus números mientras que Juan Antonio Anquela sumaba 13 pero mantenía al equipo fuera del descenso.

GranadaActualizado a
Joaquín Caparrós en el entrenamiento del Granada
Pepe VillosladaDIARIO AS

El Granada acaba el año en zona de descenso. Ni los más pesimistas podían esperar un desenlace de 2015 así cuando Caparrós fue anunciado como entrenador del Granada y se sucedió una cascada de fichajes que prometían mejorar la plantilla. Javi Márquez, Rochina, Córdoba... y sobre todo el entrenador. Joaquín Caparrós ha sido la estrella del nuevo Granada desde el principio, el hombre elegido para liderar un proyecto que quiere seguir creciendo en Primera División. Por su experiencia, capacidad y buenos resultados, parecía que este era el año para empezar a no sufrir en el vagón de cola, como había sucedido en las tres campañas anteriores con Fabri, Anquela o Alcaraz. Por comparar, el Granada de Fabri de la 11/12 sumaba 16 puntos tras la misma jornada y era decimosexto; el Granada de Anquela de la 12/13 también tenía 13 puntos aunque fuera de la zona de descenso; y el Granada de Alcaraz del año pasado ya alcanzaba los 20 puntos y se encontraba en una cómoda décima plaza. En suma, este inicio de campeonato es el peor desde que el Granada regresó a la élite.

Por el momento el rumbo que está trazando el equipo sigue siendo muy preocupante. De estar invicto en la pretemporada y de ser coreado el entrenador durante el partido de presentación el pasado verano, la grada ha asistido al derrumbe estrepitoso tras un inicio de Liga más que esperanzador con ocho puntos en las cuatro primeras jornadas. Los números asustan: 12 partidos seguidos sin ganar, cinco puntos sumados de los últimos 36 en juego y solo diez goles anotados en 16 partidos, farolillo rojo en esta clasificación. De la ilusión a la contrariedad, de los vítores a la angustia del respetable. Hasta algún pañuelo de protesta acompañó a la pitada generalizada que despidió a los jugadores cuando finalizó el encuentro frente al Getafe.