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RACING 1 - SPORTING 1

Iñaki salva al Racing de caer ante un sólido Sporting

Pablo Pérez adelantaba a los asturianos en la primera mitad pero Iñaki marcó el definitivo empate a uno. 4.000 asturianos se desplazaron al Sardinero.

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Iñaki salva al Racing de caer ante un sólido Sporting
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Un gol de Iñaki salvó al Racing de encajar la tercera derrota consecutiva y privó al Sporting de sumar tres puntos que había merecido en la primera parte, para relajarse en el inicio de la segunda y acabar desaprovechando numerosas ocasiones tras encajar el empate (1-1) por su propia pasividad.

La 'mareona' rojiblanca se dejó notar en El Sardinero abarrotando el fondo sur que dejó libre el club cántabro, con la seguridad de que cientos de aficionados del Sporting iba a aprovechar la proximidad geográfica para ver medirse al único equipo invicto de la categoría ante un Racing necesitado de puntos.

Difícil lo tuvo la afición cántabra para contrarrestar los cánticos de más de 4.000 asturianos, en un partido más propio de la Primera División, entre dos equipos que salieron con 'onces' iniciales que ofrecían dudas en ataque.

En el Racing debutaba en punta Adán Pérez en lugar del "tocado" Koné -en el banquillo como posible revulsivo para los últimos minutos-; mientras que el Sporting salía sin un delantero específico, con el camerunés Dani Ndi como hombre más adelantado.

Los dos equipos se contagiaron del ambiente que se vivía en las gradas y desde el principio jugaron con ambición y ganas de agradar, con ligero dominio del Sporting, que dispuso pronto de una clara ocasión, en una jugada de Ndi, con pase en diagonal a Jony que, solo ante Mario, no acertó en el control, dando tiempo a reaccionar a la defensa.

Si el primer aviso se gestó por la banda derecha, el gol de los asturianos llegó por el otro flanco, en una rápida triangulación entre Carmona y Jony, que acabó con un pase horizontal casi desde la línea de fondo, que Pablo Pérez no tuvo más que empujar al fondo de las mallas.

El gol dejó tocado al Racing y dio alas a un Sporting que iba mostrando su superioridad en todas las facetas del juego, ordenado en defensa, acertado en los pases e incisivo en sus salidas por ambas bandas.

La falta de recursos en ataque del Racing cuando no juega Koné era palpable. Sin un referente en punta, los hombres de Paco Fernández lo fiaban todo a balones colgados al área que no planteaban apuros a la zaga sportinguista.

Tras el descanso, el Racing adelantó sus líneas y tuvo más presencia en terreno del Sporting, para estrellarse una y otra vez con la defensa sportinguista. No obstante, los cántabros pudieron empatar cuando Alvaro ganó la espalda a Isma López, para enganchar una volea que superó por alto a Cuéllar y fue a dar en el poste.

Poco después, el Racing aprovechó el primer fallo de la zaga rojiblanca, que no acertó a despejar un balón que quedó sin dueño en junto al punto de penalti y que cabeceó flojo y colocado Iñaki, lejos del alcance de Cuéllar.

A partir del empate, de nuevo se vio a un Sporting ambicioso. Así, se entró en una fase de llegadas alternas, con poco centrocampismo, en la que daba más sensación de peligro el equipo asturiano, que dejó escapar una clarísima doble ocasión, a disparo a bocajarro de Ndi, que rechazó Mario a pies de Jony, cuyo duro remate se estrelló en el cuerpo de Borja San Emeterio, con el portero ya batido.

En la recta final, Paco Fernández introdujo al renqueante Koné, por el lateral Saúl, en clara apuesta ofensiva. Pero el peligro lo creó el Sporting, que asedió el área de un Racing que volvía salir indemne de otra doble oportunidad de los asturiano, fallada en primera instancia por Castro, solo ante Mario, que inmediatamente después se lucía a tiro de Jony.

Los últimos minutos fueron un monólogo del Sporting ante un Racing peleón pero con síntomas de agotamiento, que en esta ocasión supo defender el empate y no tuvo la inocencia que le ha costado varios puntos en otras jornadas.