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Cerco a los ultras

La policía sospecha del grupo descontrolado ‘Mini Casuals’

Los ‘Casuals’ fueron el grupo más peligroso de la grada del Camp Nou. Pero creció una ‘cantera’ de ultras muy jóvenes que pasaron a ser conocidos como los Mini Casuals.

Actualizado a
Zona peligrosa. Calle en la que se suelen reunir los ultras conocidos como ‘Mini Casuals’.

Los Mossos d’Esquadra sospechan de que la agresión que sufrieron dos aficionados del París Saint-Germain a la salida del Camp Nou después del partido entre el Barcelona y el conjunto galo de la Liga de Campeones pueda ser obra de una facción relacionada con los Boixos Nois conocidas entre los ultras y los policías como ‘Mini Casuals’.

Los ‘Casuals’ fueron en su día el grupo más peligroso de la grada del Camp Nou y aunque nacieron dentro de los Boixos Nois, pronto se hicieron con el control de la grada. El grupo fue perdiendo relevancia a medida que sus miembros más activos entraban en prisión, pero a su alrededor creció una ‘cantera’ de ultras muy jóvenes que admiraban las gestas de sus mayores y que pasaron a ser conocidos como los Mini Casuals.

Muchos de sus integrantes son menores de edad o a duras penas superan los 18 años. La Policía les considera imprevisibles, agresivos y muy violentos. Ellos son los principales sopechosos para los Mossos de la agresión del miércoles pasado.

De entrada, la zona de la agresión coincide con la de los bares que habitualmente frecuenta este grupo que normalmente no entra al estadio al no ser socios y no disponer de entradas. Tampoco tienen capacidad económica para acudir a desplazamientos. Su actividad es la de reunirse cerca del estadio y, ocasionalmente como se sospecha, “salir de caza” en días señalados.

Medidas policiales. Los Mossos de Esquadra aún no han conseguido detener a nadie, pero han expresado su intención de endurecer de acuerdo con el club los protocolos para acceder a entradas por parte de los aficionados que viajen con el equipo.

Según explicó un representante de la policía catalana, la idea de los Mossos es que “las entradas en los desplazamientos sean nominales, para tener controlado a todo el mundo”.