Eibar - Real Madrid
Eibar prepara ante el Madrid su particular ‘Guerra de los Mundos’
Los eibarreses sostienen que hay también un mundo de diferencia en la ilusión con la que las dos aficiones y los jugadores afrontan este partido, un hito histórico para Eibar.
Hablar de presupuestos es empezar a perder el partido”, es la filosofía de Garitano, del Eibar y del propio pueblo eibarrés. La ciudad se engalanará para recibir al Madrid, pero el partido tendrá poco de amistoso: el pez pequeño quiere comerse al grande, como si de una particular Guerra de los Mundos se tratase (al menos los números dicen que se enfrentan dos mundos diferentes) en la que la ilusión será el arma fundamental de los locales. Se enfrentan el presupuesto más pequeño (aunque este año se multiplicase por cuatro hasta los 15,6 millones) y el más grande (530).
La diferencia abismal entre ambas entidades no se traduce en la tabla: el Eibar sólo ha sumado 14 puntos menos que el Madrid de 33 posibles, si bien Cristiano ha marcado cinco goles más que todos los armeros juntos (18 por 13). Pero nada puede con la ilusión del Eibar, que protagonizó dos ascensos consecutivos desde Segunda B para cumplir el sueño de Primera después de 74 años de historia de la entidad.
Por eso habrá fiesta en la ciudad. El encuentro de hoy coloca más que nunca a Eibar en el mapa. Tanto es así que lucirá la publicidad de una marca china en sus pantalones sólo para este día: Tuhu, un portal de Internet. Lo hará en el espacio que habitualmente ocupa Wiko, con quien ya se había pactado esa posibilidad.
Los eibarreses han engalanado con multitud de banderas azulgranas los balcones y ventanas de las viviendas de la localidad. Se pintarán de azulgrana los pasos de peatones, en la zona peatonal, donde no podrán acceder los vehículos. La gastronomía ocupa un lugar importante con dos eventos gastronómicos, y la pastelería Antxon ha recibido el encargo de Wiko, patrocinador del club guipuzcoano, de cocinar una tarta gigante de 100 kilogramos, con el merengue de ingrediente. La consigna es clara: “Nos comemos a los merengues, aupa Eibar”. El pastel medirá 12 metros de largo por medio metro de ancho. Tendrá colores azulgranas y fotografías comestibles. El reparto de 2.400 porciones de dicha tarta comenzará a las 13:30 horas en la plaza de Unzaga, en la carpa festiva que se ha instalado.
Sin Florentino. El alcalde de Eibar, Miguel de los Toyos, y el presidente del club guipuzcoano, Alex Aranzabal, regalarán a Butragueño (Florentino está en Dubai) una insignia en damasquinado, una artesanía típica de los eibarreses. Pero no será una insignia del Eibar, sino del club madridista, y se entregará antes del partido en el centro de la ciudad.
La fiesta pretende extenderse con una victoria en el campo, donde Cristiano cobra más que la totalidad del presupuesto del Eibar en cuya plantilla paradójicamente, según la normativa UEFA (de 15 a 21 años con más de tres años consecutivos en los filiales) sólo Capa es estrictamente de la cantera, aunque Irureta, Irazusta y Añibarro también salieron de ella. En el conjunto armero hay tres nacionalidades. En el madridista, diez. Dinero frente a buen hacer, globalidad frente a localismo, obligación de ganar frente a ilusión... La Guerra de los Mundos se escenifica en Ipurua.