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FIFA

Blatter: "Si hubiera algo que ocultar no iríamos a la Fiscalía"

El presidente de la FIFA justifica por qué no hace público el Informe García: "Si lo hacemos, contravenimos el derecho de asociación y derecho estatal".

MadridActualizado a
Joseph Blatter, en el momento en que Qatar fue elegida sede del Mundial 2022.
EFE

Minutos después de hacer pública la decisión de poner en manos de la Fiscalía Federal de Suiza a los acusado en el informe García por presuntas prácticas delictivas, la web de la FIFA publicó una entrevista con su presidente, Joseph Blatter, en la que argumenta las razones de la medida. Estas son las preguntas y las respuestas.

A instancias del juez Hans-Joachim Eckert, usted ha presentado una denuncia ante la fiscalía federal suiza. ¿Se constatan indicios de un comportamiento delictivo de algunas personas en relación con el informe de Michael García sobre la adjudicación de los Mundiales de 2018 y 2022?

He presentado la denuncia por recomendación del juez Eckert. Yo mismo soy incapaz de determinar si se trata de hechos delictivos. No soy jurista. Tampoco he sido el destinatario del informe de la investigación, que nunca he visto. No obstante, teniendo en cuenta la recomendación del juez Eckert, era mi obligación como presidente de la FIFA entablar la denuncia.

¿Significa que los órganos de la Federación Internacional no trabajaron como es debido en el procedimiento relativo a la adjudicación de los Mundiales de 2018 y 2022, ya que ahora son instancias estatales las que se ocupan, o deben ocuparse, del Informe García?

Confío plenamente en la labor de los órganos independientes de la Comisión de Ética de la FIFA y sus presidentes. Hasta la fecha han trabajado bien y estoy convencido de que continuarán haciéndolo. No obstante, hay que reconocer que la Comisión de Ética se ve limitada en algunos casos. Como órgano de una entidad privada, no dispone de los mismos medios que un fiscal federal. Si el presidente del órgano de decisión de la Comisión de Ética —un juez— me recomienda acudir en un determinado momento a las autoridades estatales, escucho su consejo.

¿Se puede decir entonces que la Comisión de Ética ha llegado al límite de sus posibilidades?

No cabe duda de que la Comisión de Ética ha hecho todo lo que podía dentro del marco jurídico de la FIFA para esclarecer los hechos en torno a la adjudicación de los mundiales. Sin embargo, en este tipo de situaciones, llega un momento en que evidentemente se han agotado las posibilidades a nuestra disposición. Michael García ha entregado su informe y el juez Eckert lo ha examinado y ha hecho una declaración al respecto. Además, llegó a la conclusión de que algunos puntos debe aclararlos la fiscalía federal. Esto es acertado y confío en su ponderación. No obstante, Michael Garcia tiene plena libertad para emprender otras investigaciones internas de la FIFA contra personas concretas, en caso de que lo estime necesario conforme a su informe. Además, no cambia la opinión del juez Eckert, quien ha declarado que se han cerrado las investigaciones relativas al procedimiento de candidatura a la organización de las copas mundiales 2018 y 2022.

¿La medida que ha tomado hoy ilustra igualmente el compromiso de transparencia relativo al controvertido procedimiento en la adjudicación de los mundiales?

Por supuesto. Si tuviésemos que ocultar algo, no acudiríamos a la fiscalía federal. Los órganos internos de la FIFA han hecho todo lo posible dentro de su jurisdicción y siguen trabajando en el caso. Ahora se presenta la oportunidad adicional de que la parte estatal arroje luz a los hechos. Esto demuestra que la FIFA de ningún modo se opone a la transparencia.

Se ha criticado a la FIFA precisamente por el hecho de que no es transparente, ya que no publicó el Informe Garcia…

Quiero reiterar que hemos aclarado completamente esta cuestión desde el punto de vista jurídico. El resultado es claro: si la FIFA publica este informe, contraviene su propio derecho de asociación y también el Derecho estatal. Las personas que han exigido su publicación en los medios de comunicación y en otros ámbitos, son claramente de la opinión que la FIFA, en este sentido, debería o tendría que ignorar tal Derecho. Esto es algo que obviamente no podemos hacer. La FIFA tiene su sede en un Estado constitucional y debe acatar el Derecho y la legislación nacional.