Grupo H | Athletic - Oporto
En tromba a por el Oporto
El Athletic, sin Aduriz, irá a las bravas a por la victoria en el partido de esta noche (20:45 C+ LC2). Oportunidad para Gurpegui y Beñat en un verde que pedirá pelea y desplazamiento.
Frío y lluvia en San Mamés. Calor y mucho en juego sobre el césped. El Athletic está obligado a batir al líder Oporto para seguir vivo en la Champions. Valverde no firma el tercer puesto, que da el pase a la Europa League. Hay que apurar las opciones matemáticas. Hoy son pocas, pero quizás mañana queden a expensas de ganar una final en Ucrania. Ni el Oporto ni el Shakhtar son el Madrid, el Barça o el Bayern. Tiene fe.
No existe otra salida para los leones que salir sin escudo, en tromba a por el Oporto y dar una alegría a una afición enfadada tras el maltrato en la excursión a Do Dragao. Los rojiblancos necesitan ganar para mantener viva la llama de la esperanza, dar la campanada. Lopetegui, más relajado después de sus últimos triunfos, llega con sus dragones bajo la idea de sentenciar el pase y dedicarse al asalto al primer puesto liguero, que de momento ostenta el Benfica. El empate sería un gran botín para los portugueses.
El gran problema de los locales es la ausencia de Aduriz, autor de siete de los trece goles del difícil año, tres en esta competición. El peso del ariete recae en el joven Guillermo, más veloz y menos demoledor en el remate. Ya sacó dos veces los colores a Indi y Maicon en la ida y anotó un hermoso gol. Esa es la esperanza.
Cambios. Txingurri tiene más problemas por la merma física de futbolistas como Laporte, De Marcos o Muniain. Habrá que ver cómo juega sus bazas, porque la victoria es capital. Todo apunta a que Gurpegui y Beñat, primoroso en la segunda mitad en la ida, tengan su oportunidad sobre un verde que pedirá pelea y desplazamiento de balón.
Los visitantes no se pueden encerrar, ese no es su fútbol. Futbolistas como Herrera, Quintero y Brahimi dependen mucho de la posesión. Ya se vio que Casemiro no da abasto en defensa y se tuvo que liar a patadas, algo que Felix Byrch no consentirá esta noche. Jackson Martínez es su gran amenaza y tiene el recambio del poderoso Aboubakar.
Partido de alto riesgo con unos 1.500 portugueses
El Comité Nacional Antiviolencia ha decidido que el partido sea declarado de alto riesgo. Así que las taquillas de San Mamés se cerraron ayer a las ocho de la noche y no se venderán hoy entradas. El dispositivo policial de la Ertzaintza será importante para controlar el orden público ante la llegada de unos 1.500 seguidores del Oporto, que han pagado 45 euros por las localidades. Existe el temor a enfrentamientos, ya que fue notorio que el trato a la afición rojiblanco no fue bueno en la ida por los responsables de seguridad. Además, hubo una sobreventa de localidades en la zona en la que fueron ubicados los seguidores bilbaínos. Para cimentar un clima de normalidad, el Athletic exculpó en su comunicado a la afición del Oporto. No es la mayor afluencia de espectadores de aquel país a Bilbao, ya que el Sporting de Portugal desplazó muchos más seguidores hace 29 años en una eliminatoria de la Copa de la UEFA.