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MÁLAGA CF

Ya se han agotado las entradas para el Málaga-Rayo Vallecano

El Málaga presentó el nuevo contrato de Samu Castillejo hasta 2018. El jugador, muy feliz. “Es un sueño jugar en el equipo de mi tierra”.

Actualizado a
La Rosaleda y su gran ambiente.

Increíble pero cierto. Se han agotado las entradas para el Málaga-Rayo Vallecano que se jugará el próximo domingo a las 12:00 horas y el club ya ha puesto el cartel de “no hay billetes”. Hay varias causas que apoyan este pelotazo. Con motivo del Día de la Infancia, el club puso a la venta 4000 entradas especiales a cinco euros para los niños y 10 para un adulto acompañante. Ni que decir tiene que han volado. Además, el Rayo Vallecano ha solicitado para sus abonados 250 entradas a un precio de 25 euros. Es decir que la Rosaleda completará su aforo de 30.000 localidades en este partido matinal.

La única posibilidad de conseguir alguna entrada sería que el equipo madrileño hiciera alguna devolución.

Samu Castillejo renueva: "La gente es feliz viendo un Málaga con tantos malagueños".

El acto fue introducido por Antonio Benítez, consejero consultivo del club. “Es un jugador que vino siendo un ‘chaveita’ como infantil y quiero dar las gracias a quien lo trajo porque desde el primer momento que le vimos pensamos que era jugador para el Málaga. Gracias a su club de procedencia, el Mortadelo, equipo de cantera malagueño que facilitó su llegada. Su gran virtud es que sabe escuchar”. Benítez hizo un inciso muy especial. “Quiero tener un recuerdo para una persona muy importante, para Juan Cortés (periodista, biógrafo del Málaga y antiguo gerente del club que acaba de fallecer) que fue un hombre de cantera. Siempre estuvo muy allegado y me ayudó mucho a mí y al Málaga”.

Mario Husillos, el director deportivo, también le dedicó sinceros elogios. “El nombre de Samu Castillejo está en los oídos de la gente del club desde hace muchos años. En todas las conversaciones que hemos tenido, ha quedado claro que siempre quiso ser futbolista. Armamos los equipos pensando en la gente que va viniendo. Al primer equipo no se sube por cupos sino por méritos y por trabajo. La política del club es que los chicos sean importantes. Debemos tener buena relación con los equipos de fútbol-base de la ciudad. No tiene precio tener a un futbolista que quiera al club”.

Y Samu, tan feliz. “Debo dar las gracias a mi familia, mi agente, mis compañeros y a toda la gente que ha confiado en mi desde el primer día que vine aquí. Creí mucho en mí y hasta ahora lo he podido demostrar y espero seguir demostrarlo en este gran club. Estoy muy contento de poder participar en la primera plantilla del equipo de mi tierra”.

El jugador piensa que su meta es el correcto. “Debo pensar en mi contrato, en el Málaga y en todo lo que me queda para vivir aquí que espero que sea mucho y muy bonito. Es una experiencia única para un canterano. Espero ahora poder dar el doble”.

Su vida desde luego ha cambiado: “En lo personal vivo lo mismo. Llevo la misma vida pero salgo más en los medios. Sigo siendo la misma persona. Tengo la misma vida y soy el mismo de antes. En lo deportivo si ha habido un gran cambio”.

¿Reto?: “Jugar los más minutos posibles. El míster me está ayudando mucho y cada día en los entrenamientos me abre puertas nuevas. Quiero darle las gracias”.

Samu García, Juanmi, Juanpi, Sergi Darder, Samu Castillejo:.. la cantera, al poder. “De abajo vienen chavales muy buenos con mucha proyección. Ernesto, Kuki, Alex Portillo… Para la gente es una satisfacción ver un Málaga con tantos malagueños”.

Un guiño para los niños en el Día de la Infancia tras un entrenamiento donde fueron nada menos que 4.000. “Es una alegría ver a los niños como disfrutan en cada entrenamiento que nos ven o en cada partido. Los futbolistas debemos estar siempre a su disposición para fotos o lo que sea. El domingo esperemos tener los tres puntos contra el Rayo Vallecano”.

El año pasado estuvo a punto de ir cedido al Zaragoza: “Me dijeron de irme cedido a un club de una categoría superior y estaba todo casi hecho. Pero Salva Ballesta me convenció para que me quedase”.