EIBAR
Aviso eibarrés a navegantes
Aunque los hombres de Garitano han vuelto esta madrugada a casa de vacío, anoche demostraron en el Calderón que no han llegado a Primera para hacer turismo.
A pesar de saltar al terreno de juego algo “asustados”, tal y como reconocía el propio entrenador armero en sala de prensa a la conclusión del choque, hubo momentos en los que los eibarreses pusieron contra las cuerdas al vigente campeón de Liga.
No obstante, este ‘miedo’ inicial le costó al Eibar encajar dos goles a balón parado en 25 minutos. Primero Miranda, a saque de córner, y después Mandzukic, a falta botada por Gabi, hicieron que el auténtico golazo que metió Abraham pasada la media hora de juego por toda la escuadra, fuera en vano.
En la segunda mitad los guipuzcoanos levantaron la cabeza e hicieron ver al Atleti que iban a vender muy cara su derrota. Y así, con los colchoneros pidiendo la hora, Ángel enmudeció al Manzanares a tres minutos para la conclusión en un mano a mano con Moyá, en el que el defensa Siqueira anduvo muy rápido, pero finalmente el ariete tinerfeño cruzó en exceso y dejó con la miel en los labios a toda la afición azulgrana presente en Madrid de haber logrado un empate más que merecido.
Al final contento generalizado en el entorno eibarrés por el juego exhibido, pero no con el resultado. La próxima oportunidad para los pupilos de Garitano, con posibilidad de redimirse, dentro de quince días frente al Deportivo de la Coruña en Ipurua.