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Barcelona

La joven estrella que se le escapó a Real Madrid y Atleti

Munir firmó por el Barça pese a brillar en Majadahonda. Ni Real Madrid ni Atlético se interesaron en él como juvenil. Hoy golea como jugador culé.

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La joven estrella que se le escapó a Real Madrid y Atleti

La irrupción este verano de Munir El Haddadi ha vuelto a poner en estado de alarma a los dos grandes clubes madrileños. La pregunta que ronda a muchos es cómo un chaval criado en los campos de fútbol de la sierra madrileña acabar en La Masía.

El delantero de origen marroquí fue descubierto por Antonio Gabaldón y pasó por varios clubes hasta que el Atlético se hizo con él e inmediatamente lo cedió al Rayo Majadahonda. Fue ahí donde José Luis Colomo, ojeador blaugrana en Madrid, le echó el ojo. Tal fue la impresión que le produjo que llamó al Camp Nou y pidió a Albert Puig, coordinador del fútbol base, la presencia de algún técnico para evaluar sus opciones de ir al Barça.

Fue García Pimienta, segundo entrenador del Juvenil B, quien viajó hasta la capital para atender a la urgencia de Colomo. Asistió a un partido entre el Brunete y el Rayo Majadahonda y poco más necesitó. En aquel partido Munir se salió con un hat-trick perfecto (gol con pierna diestra, zurda y de cabeza) y redactaron un informe que presentaron a la dirección deportiva. A Munir se le definía como un goleador de un estilo “asalvajado”, un rasgo que proponían no fuera eliminado de su repertorio en caso de llegar a la entidad.

En el Real Madrid no repararon en él pese a destacar apenas a unas decenas de kilómetros del Bernabéu. El Atlético no movió un dedo por retenerle en la capital. Sí lo hicieron otros clubes españoles y extranjeros, como Osasuna, Valencia o City. De hecho, como ayer publicaba Mundo Deportivo, un ‘tuit’ suyo afirmando su fichaje por el club pamplonica aceleró los trámites en el Camp Nou. Se presentó una oferta y semanas después se unía al Juvenil B de Sergi. Aún así, hubo un último intento del Real Madrid hace unos meses. Los blancos vieron la opción de incorporarle y, tras la salida de Tony Sanabria al Roma, el Barça quiso blindar a su última perla, temiendo una posible fuga de talentos. Pasó desapercibido para los grandes clubes madrileños y hoy golea como culé.