BENFICA 0 - ATHLETIC 2
El Athletic ya está preparado para la Champions League
Partido muy serio del bloque titular ante el Benfica, al que abrumó con su presión. Beñat se reivindicó y se agarra al puesto que dejó Herrera.
Quedan aún tres semanas, pero el Athletic está tan fino que casi hasta asusta. ¿Será demasiado pronto? La previa de Champions se atisba a lo lejos, pero Valverde ha afilado al equipo como en muchas fases del año pasado, cuando se agarró como una fiera a la cuarta plaza. El Benfica, campeón de todo lo posible para él durante el curso pasado menos de la Europa League porque el Sevilla se lo impidió en una dramática final, fue un espectador asombrado en la localidad suiza de Friburgo. Bien es cierto que llegaba tras jugar ayer y ganar al Sion, que ha revolucionado el equipo con un montón de bajas y los nuevos aún casi ni se conocen, pero su heráldica le marca como uno de los grandes de Europa.
Valverde sacó a todo su bloque titular en el ensayo más fiable de lo que va de pretemporada, quitando en la derecha a Susaeta; allí se acomodó Ibai, a pie cambiado. Lo hizo bien. Está con mucha hambre. Todo el engranaje marcha como un reloj. Por eso no movió piezas durante 74 minutos (Jorge Jesús, preparador de las Águilas Rojas, cambió y recambió como en un partido de baloncesto). Gurpegui es un coloso atrás y aguantó 79 minutos. Increíble en un hombre veterano que sale de una lesión de rodilla. El ritmo, a estas alturas de temporada, fue espectacular por parte de los leones La cita era un examen a Beñat, que se acomodó en la media punta y aprovechó la tarde, vaya que sí. Su alternancia en esa posición con Rico fue de lo más destacado del amistoso. Se asomó mucho por el balcón del área, estuvo en contacto con el balón continuamente, fue a la presión como uno más y encontró oportunidades de gol.
Beñat hasta metió un gol en un bello contraataque tras pase de Aduriz por la izquierda. Gran definición. Muniain, por la banza zurda, volvió a demostrar que está con una chispa y energía estelares. Desborda como el mejor Messi y asusta a los enemigos, y eso que falló un gol cantado tras lanzarse al suelo a pase de Beñat. Da igual su producción: esta pretemporada hace augurar con él una previa de Champions fructífera. Aduriz abrió la lata en un saque de esquina, que remató Laporte al poste. De nuevo recogió un rechace (en Fügen ante el Werder fue a tiro suyo) y dejó claro que está muy fino de cara a gol.
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