Primer 'tiempo muerto' para que los jugadores se hidraten
El partido entre Holanda y México se paró en dos ocasiones debido al calor en Fortaleza. Una en la primera mitad y otra a doce minutos para el final.

El partido entre Holanda y México contempló la nueva normativa implantada por la FIFA, por sentencia judicial, por la que el árbitro debe detener cinco minutos el partido, pasada la media hora de juego, cuando la temperatura supere los 32 grados centígrados, para que los jugadores se hidraten.
El alto calor y la intensa humedad de Fortaleza propició que, a la media hora del choque, el árbitro Pedro Proenca permitió que los futbolistas acudieran a la grada para ingerir líquidos. Minutos después, el choque se reanudó.
En la segunda parte, el colegiado portugués volvió a parar el encuentro debido al calor y se reanudó cuando restaban doce minutos para el pitido final.