Dos trenes que van embalados se cruzan esta tarde en El Arcángel

Desde que en la trigésimosegunda jornada Córdoba y Murcia igualaran a un gol en El Arcángel, ambos equipos cogieron una velocidad de crucero que los lleva a enfrentarse en el primer asalto de los cuatro que habrá que disputar por un puesto en Primera División. Sus números en la cuenta atrás de la Liga no pudieron ser más similares: 22 puntos sumados y sólo una derrota en el zurrón. El momento de ambos es el ideal.

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Pero las eliminatorias no tienen nada que ver con la Liga regular y por ellos los dos hacen borrón y cuenta nueva. El Córdoba, con las bajas de López Silva y Nieto, lesionados la última jornada, y el Murcia con las ausencias de Tete, por sanción, y de Óscar Sánchez, por lesión. La batalla también estará en los banquillos, donde dos técnicos jóvenes como Ferrer y Velázquez pondrán a prueba una pujanza que les ha llevado para entrar en la rueda de candidatos para muchos otros clubes. Aire fresco para una categoría que este año ha recuperado la pujanza, igualdad y emoción que había perdido en temporadas anteriores.

Viejos rockeros. Para el cordobesista Abel será un partido especial, por enfrentarse al que fuera su equipo. Para Casto, baluarte del Murcia esta temporada, supone la oportunidad de volver a la élite tras salir del Betis con más sombras de las que quizás merecía. El ambiente de El Arcángel será clave para los intereses locales, puesto que el Murcia fue, junto al Eibar, el equipo que menos partidos perdió fuera de casa en toda la Liga. Dos trenes a toda velocidad tienen parada esta noche en Córdoba. Será la penúltima del viaje para uno de ellos y la plataforma de lanzamiento para el otro.