SEVILLA | GAMEIRO

“Llevaba seis días sin tocar balón, preferí no pensar nada”

El delantero del Sevilla Kevi Gameiro admitió que llevaba una semana sin tirar a puerta y que no tenía sensaciones para jugar pero que está en la historia: "No se puede describir".

“Llevaba seis días sin tocar balón, preferí no pensar nada”
AStv
Juan Jiménez
Redactor jefe de AS. Fue colaborador en AS (2000-04) y, después de pasar por Málaga Hoy, regresó como jefe de Sección en Málaga. Delegado de Andalucía entre 2009 y 2012, colaboró en la integración digital-papel de AS en Madrid. Cubre la información del Barça y la Selección de baloncesto. Tres Juegos Olímpicos. Colaborador de SER, Canal Sur y Gol.
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Kevin Gameiro es un tipo tímido. Elude si puede la conversación en español pero lo entiende y ya lo habla con cierta corrección. Tanto que, cuando se le pregunta por el momento del penalti que certificó la tercera Europa League de la historia del Sevilla, intenta encontrar la palabra exacta: “No se puede…, ¿cómo se dice? describir”. Gameiro, un viejo deseo de Monchi desde que jugaba en el Lorient antes de terminar en el PSG, jugó cojo literalmente la final. Emery no se atrevía a meterlo y a él no se le veían buenas sensaciones. Ni siquiera en el calentamiento.

El asunto era gordo. Él mismo se reía cuando este periódico le preguntó si había ensayado el lanzamiento de penalti antes de la final: “¡Si no había tocado el balón en seis días! No podía entrenar y me dolía muchísimo la rodilla. Cuando he ido a lanzar he decidido no pensar en nada porque me dolía mucho. Era mejor así”. Un detalle en el que sólo se pudo reparar después de la confesión del francés hace pensar que era así. Antes de los penaltis, Gameiro había estado tocando la pelota con uno de los miembros del staff técnico del Sevilla para entrar en calor con la zona. Gameiro, que apareció en el minuto 103 de partido y cuyo esfuerzo valorará para siempre el club porque no estaba en condiciones de jugar (Monchi le abrazaba y pellizcaba al final), le costó al Sevilla unos 8 millones de euros. Ha hecho 15 goles en Liga, pero no estará en el Mundial. Lo lleva con pena. “Es una decepción, pero hay que seguir”. Eso sí, ya está en la historia del Sevilla: “Sé que mi imagen lanzando el penalti quedará, pero por lo que estamos contentos es por haberle dado gloria al club”.

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