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Sevilla - Valencia

El Valencia contará con 2.300 hinchas animándolo en Nervión

Se rozará el lleno en el Ramón Sánchez Pizjuán, los abonados han tenido que pagar. Plan de viaje: los aficionados visitantes llegarán en AVE, autobuses y coches particulares.

Actualizado a
Pese a que no se llenará, el Sánchez Pizjuán tendrá un aspecto similar al de las grandes citas.
Toni Rodríguez

El Ramón Sánchez Pizjuán no colgará el cartel de “no hay billetes” para la semifinal de mañana, aunque sí registrará la que posiblemente sea su mejor entrada de la temporada, puesto que se espera superar el número de espectadores que hubo en el partido de ida de los octavos de final ante el Betis.

En esta ocasión, los abonados del Sevilla han tenido que pasar por caja y pagar por el partido. Las entradas para los socios, que tuvieron hasta el lunes para retirarlas, oscilaban entre los 15 euros y los 30. Casi la totalidad de los 33.000 abonados han retirado su entrada, pero el elevado precio de venta para el público (los precios iban entre los 45 y los 90 euros) provocará que no se agote el papel.

Por parte del Valencia llegarán 2.300 aficionados, que en una mañana adquirieron todas las entradas disponibles al precio de 30 euros. Para el partido de vuelta, el Sevilla contará con el mismo número de entradas y al mismo precio, al haber llegado ambos clubes a un acuerdo amistoso.

A las 8:00 de mañana partirá un AVE desde Valencia a Sevilla, fletado por la entidad che, en el que se desplazarán 600 aficionados. El resto lo hará tanto en los autobuses puestos por el club como en sus coches particulares. Hay que recordar que para la vuelta, el Valencia ha optado por no cobrar a sus abonados.

De este modo, Nervión superará los 35.000 espectadores, pero no se llenará como sí ocurrió en las semifinales ante Schalke u Osasuna donde, curiosamente, el precio de las entradas era el mismo que en esta ocasión.

Bufandas. El Sevilla regala a todos los aficionados que acudan al partido una bufanda conmemorativa de la semifinal. Sin embargo, lo que en un principio era un detalle con los aficionados, ha recibido numerosas críticas por parte de los mismos. El problema es que la bufanda tiene dos mitades, una para cada equipo. La mitad blanca para el Sevilla y una mitad negra para el Valencia, por lo que, si se usan mayoritariamente, la grada recordará, en colores, a Mestalla.