Un partido para no equivocarse

El Barça y el Betis juegan hoy un partido al límite por motivos absolutamente opuestos, pero su futuro inmediato depende de los noventa minutos de esta tarde en el Camp Nou. El Betis llega sin nada que perder, casi desahuciado, perdido en la cola de la clasificación pero con la esperanza de los creyentes que han visto cómo no hace mucho tiempo esa misma camiseta verdiblanca le estropeó una Liga a los culés. El partido de hoy no es de la Liga del Betis y puede que esa razón les haga más peligrosos que nunca.

Ampliar

El Barça sabe que hoy sería el peor día para equivocarse. Con el Atlético diezmado ante el Villarreal y el Madrid visitando Anoeta sin su máxima estrella, la ocasión es pintiparada para un Barcelona que se enfrenta al colista. Pero torres más altas han caído. Y de un tiempo a esta parte, en Barcelona caen cada dos días.

Exprimirse. Asegura Martino que el Barcelona no piensa reservar a nadie en función de la cita del Calderón del próximo miércoles, donde Atlético y Barcelona se jugarán el pase a las semifinales de la Champions, que no es poca cosa.

Martino defiende que quedan doce partidos y que la situación actual está para agotar las existencias. El lema del Barça tras perder a Valdés y a Piqué en una semana es ‘Camina o revienta’ y parece que el Tata es partidario de reventar, pero con condiciones.

De entrada, está la circunstancia de que en defensa son los que son y no hay más para contar. Y luego, están los agravios a reparar con Pedro. Y que Xavi hay que reservarle para el Calderón. A partir de ahí, sólo toca no equivocarse.

Puyol se apunta al ‘sprint’ final

Gerardo Martino incluyó ayer a Carles Puyol en la convocatoria de 19 jugadores que el técnico ofreció tras el entrenamiento matinal en la Ciutat Esportiva. El central todavía no ha recibido el alta médica, pero como ya ha ocurrido otras veces podría obtenerla hoy mismo, horas antes del encuentro. Sabe que el equipo le necesita ahora más que nunca por la lesión de Piqué, que lo tendrá alejado un mes de los terrenos de juego y forzará para estar a disposición de Martino cuanto antes. No en vano, el rosarino ya reclamó su ayuda ayer en rueda de prensa: “Necesitamos que otra vez nos eche una mano”. Y Puyol tenderá esa mano en la medida que su rodilla se lo permita. Es consciente de que con la final de la Copa del Rey en el horizonte, el equipo puede tener que recurrir a él si surge cualquier imprevisto y quiere estar preparado para volver a liderar la zaga azulgrana.